ENTREVISTA INFODEFENSA.COM: Juan Nebrera, presidente de Proespacio: "España tiene que definir qué necesita del espacio para Defensa"
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ENTREVISTA INFODEFENSA.COM: Juan Nebrera, presidente de Proespacio: "España tiene que definir qué necesita del espacio para Defensa"

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23/09/2008 (Infodefensa.com) La Asociación Proespacio representa a la mayoría de las compañías españolas vinculadas al sector Espacio desde 1995. Tiene como principal objetivo la potenciación de esta industria y promover el interés de las Administraciones Públicas en los programas espaciales, cuyo sostén económico se ha demostrado fundamental para poner la industria española en el quinto lugar por contribución a la Agencia Espacia Europea (ESA, por sus siglas en inglés).

En materia de Seguridad y Defensa, queda mucho camino por recorrer. Juan Nebrera, presidente de Proespacio, está convencido que el despegue definitivo de este sector debe pasar por la creación de una "política común europea de Defensa en su aplicación al área espacio", la definición clara de objetivos a nivel nacional, sin dejar de lado la experiencia de las tecnologías desarrolladas para el ámbito civil. Por el momento, el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), dependiente del Ministerio de Industria, ha puesto sobre la mesa el proyecto PAZ, un satélite radar que dará servicio al Ministerio de Defensa junto al Ingenio, satélite de observación de la Tierra de uso civil.

¿En qué situación se encuentra España con respecto al resto de Europa en el sector espacial?

España, a nivel industrial en espacio, es ya el quinto país por contribución a la ESA, y ese es el nivel que le da a la industria. Un nivel que se ha alcanzado gracias al enorme esfuerzo que se ha hecho en los últimos cuatro años, el incremento de dinero público a los presupuestos de la ESA es muy importante y hace que tengamos mucha más cancha para conseguir contratos. Pero no hay que olvidar que estos contratos hay que ganárselos. Para ello, el CDTI debe ser capaz de considerar que el proyecto que la empresa quiere conseguir es tecnológicamente de interés para España. Si es así, pone el dinero para financiar dicho proyecto, y si se tiene una buena oferta, se consigue. Lo que se ha demostrado es que somos capaces de proponer buenas ofertas y ganarlas si hay dinero español soportando la adjudicación.

Pero en el caso del proyecto Galileo, España se ha quedado fuera...

No ha sido exactamente así, el proyecto Galileo tiene varias fases. La primera se denomina de validación en órbita, cuya financiación corría a cargo de la ESA y de la UE al 50%, y en esa fase se contrató a un conglomerado industrial que se llamó Galileo Industries en el que estaba la compañía española GSS (Galileo Sistemas y Servicios), de manera que España sí ha participado en esa fase. El problema es que el proyecto Galileo ha estado a punto de cancelarse porque no había financiación para el resto de las fases. Esa primera fase consistía en poner dos satélites en órbita y lo que serían los primeros pasos de los centros de control de Tierra. Ahora empieza otra fase, que es desplegar los 30 satélites que lleva, terminar todos los centros de Tierra y asegurarse de que todo funciona antes de pasárselo al operador.

Para esa fase, se había creado un consorcio de operadores en el que estaba Hispasat, EADS... y se han retirado porque no eran capaces de ver si ese negocio realmente les interesaba. Eso provocó que la UE retomara la idea de que se pudiera hacer una financiación pública completa, incluyendo la fase de operación. Lo que está saliendo ahora a concurso es lo que queda de los 30 satélites y lo que queda del segmento terreno. En éstos no va ha haber principales contratistas españoles, pero sí las empresas españolas se posicionarán en la industria secundaria.

¿La industria española se ha especializado en alguna tecnología en concreto?

Aún no tenemos la capacidad de hacen satélites completos. Si cogemos un satélite, el satélite completo se le denomina sistema, ese sistema se divide en subsistemas como el que se encarga del control térmico, el de producción (que consigue que llegue a su órbita y se mantenga en ella), el estructural que conforma donde se sitúan los distintos equipos... Y cada subsistema tiene distintos equipos.

La industria española a nivel de equipo está perfectamente preparada, es suministradora desde hace 20 años para distintos satélites. A nivel de ‘subsistemista' lo hemos conseguido recientemente gracias a las cargas de trabajo de la ESA. Nos falta la etiqueta de ‘sistemista', el ocuparnos de un satélite completo. ¿Qué es lo que ha hecho el Ministerio de Industria y el CDTI? Pues ponernos un satélite sobre la mesa: Ingenio, el satélite de observación de la Tierra, junto con PAZ, que es el satélite radar del Minutero de Defensa que van a constituir el sistema español de observación del territorio. El CDTI lo financia al 100% pero lo incorpora dentro de la supervisión de la ESA para que podamos integrarlo en Europa sin problemas compartiendo los mismos estándares. Va a ser contratado a una empresa española que tendrá por detrás de ella a toda una organización industrial especializada para que, por primera vez, intentemos demostrar que somos capaces de ser ‘sistemistas'. Si lo conseguimos, podremos entrar en estas competiciones en las que están las francesas Astrium o Thales.

¿Qué parte del sector espacial español se lleva Seguridad y Defensa?

En términos relativos, se lleva muy poco. Hasta ahora Defensa se ha centrado en los satélites de telecomunicaciones. La siguiente iniciativa en espacio es el satélite PAZ, en fase de contratación. Además, España participa, sin ser propietario, en otros satélites de observación de la Tierra. Esta participación le da derecho a recibir imágenes en condiciones ventajosas y poder competir industrialmente para algunos de los equipos. Es una participación pequeña, sólo del 3 al 5%. Por lo tanto, el primer satélite de Defensa será PAZ, aunque seguramente la propiedad se comparta con otros Ministerios. No hay más satélites, por eso, si se compara con los satélites científicos ‘civiles', Defensa tiene una participación pequeña.

No obstante, donde estamos más fuertes y va a ser contratado prácticamente todo en España es en los ‘centros de control de la Tierra' asociados a su satélite, porque es una tecnología que dominamos. Es más fácil, carece de los riesgos en el segmento vuelo del satélite.

En cuanto a los proyectos ‘PAZ' e ‘Ingenio', ¿de qué inversión estamos hablando?

Aproximadamente, estamos hablando de 150 millones de euros en los próximos cuatro años.

¿Qué supone la tecnología espacial vinculada a la Seguridad y Defensa en términos de I+D?

La tecnología espacial se puede entender de dos formas. Si alguien compra un satélite (pese a que en espacio no hay series, hay plataformas conocidas y probadas), no se genera I+D, sólo la parte proporcional que corresponda a los desarrollos específicos que haga el que lo vende. La I+D se hace en los programas tecnológicos. La ESA tiene tanto programas tecnológicos como programas de aplicación, en estos últimos se desarrolla un satélite completo. En los primeros, se desarrolla tecnología, por tanto, I+D. Los programas de tecnología pueden suponer un 20 al 23% de todo el presupuesto de la ESA y, teóricamente, sólo hace espacio ‘civil', la Defensa hasta ahora no está bien coordinada en Europa, no hay una estructura como la de la ESA para Defensa y Seguridad. Se está hablando muchísimo, pero hoy por hoy no está tan organizado.

Cada Gobierno tiene su propia política y quien está por delante es Francia. Por ello, el Ministerio de Defensa español lo que ha hecho es coger participaciones, pequeñas pero suficientes, en los programas franceses para las necesidades de cada momento. No hay realmente, en este momento, una política de I+D en Defensa asociada al área espacio, se deja que se desarrolle vía la ESA.

El desarrollo de la tecnología espacial española para la Defensa depende entonces de que exista esa coordinación en Europa...

Debería existir y yo creo que ahora mismo hay muchas discusiones en Europa y mucho interés en que se produzca esa política común de Defensa en su aplicación al área espacio en aras de buscar qué infraestructuras espaciales son necesarias para los distintos actores. En este camino nos tropezamos con que Francia lleva mucho camino adelantado y no está muy claro que quiera ceder o compartir su knowhow. Sobre todo lo que hace falta es que el planteamiento español en términos de Seguridad y Defensa defina muy bien qué necesita del espacio para sus objetivos: bien sea vigilar fronteras, control de inmigración, observación de determinados territorios desde los que puede venir algún tipo de amenaza, información de primera mano de los territorios donde vayan a participar las tropas españolas en misiones de paz, asegurar las comunicaciones... Muchos objetivos que, combinados con infraestructuras terrestres, se puedan conseguir con la tecnología espacial.

Una vez determinados los objetivos, vamos a ver dónde conseguimos la tecnología. Si merece la pena que España desarrolle dichas tecnologías, yo creo que sí, pero también se debería aprovechar el trabajo en el ámbito civil.



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