EADS ralentiza la producción del A400M que se ensambla en España
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EADS ralentiza la producción del A400M que se ensambla en España

EADS CASA
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05/11/2008 (Infodefensa.com) - El consorcio aeronáutico europeo EADS ha decidido ralentizar la producción del avión de transporte militar A400M cuyo ensamblaje final se realiza en España ante la acumulación de retrasos y la incertidumbre sobre su viabilidad. El Gobierno español hasta ahora no se ha pronunciado.

La división de Aviones de Transporte Militar (MTAD) de EADS, cuyo núcleo principal está en España, también ha optado por posponer indefinidamente la fecha del primer vuelo de la aeronave, a la espera de que se pueda fijar un nuevo calendario con posibilidades reales de cumplirse.

La decisión de ralentizar la producción afecta a toda la cadena de producción del avión, incluida la Línea de Montaje Final (FAL) de Sevilla con el objetivo de no saturarla, ya que está preparada para soportar la construcción conjunta de tres unidades. Hasta la fecha EADS ha ensamblado dos aparatos (uno de ellos el presentado oficialmente el pasado mes de junio) y un tercer está prácticamente acabado. Además, las secciones de los dos aparatos siguientes, los números cuatro y cinco, están ya fabricados, mientras que los elementos de estructura del sexto están en fase de ensamblaje.

Fuentes de la compañía, citadas por el diario Cinco Días, resaltaron que es "prematuro" avanzar si la ralentización del programa tendrá un impacto negativo sobre el empleo. En principio, los representantes sindicales en Sevilla consideran que la decisión no supondrá un recorte de plantilla aunque no descartan que se aplacen algunas de las contrataciones previstas para antes de finales de año.

Sin embargo, la ralentización de la producción sí afectará directamente a todos los proveedores del programa y las factorías de EADS que suministran a la factoría en San Pablo

EADS tenía previsto entregar las primeras unidades del A400M a finales de 2009, pero los problemas técnicos surgidos en la motorización han retrasado su estreno, lo que ha provocado unos sobrecostes superiores a los 1.430 millones de euros. La cifra, según algunos analistas, podría ampliarse en unos 400 ó 700 millones más por los continuos problemas.

Indemnizaciones

El consorcio europeo enfrenta también al problema de si los países que tienen contratos firmados ejecutan su derecho a indemnizaciones por los incumplimientos en las entregas. El ministro francés de Defensa, Hervé Morin, explicó que estaría dispuesto a "cerrar los ojos sobre un cierto número de penalizaciones" con la condición de que EADS "se comprometa con una fecha de entrega precisa, firme y definitiva". Alemana, sin embargo, se ha mostrado dispuesta a solicitar el pago de las penalizaciones fijadas en los contratos.

El Gobierno español no se ha manifestado por el momento al respecto. El pasado 23 de octubre, la ministra española de Defensa, Carme Chacón, visitó la factoría de San Pablo de EADS-CASA y calificó el proyecto de "prioridad" del Gobierno, al considerarlo como "el mayor reto tecnológico y militar" y estimar que el programa esta "empujando en la buena dirección".

"Se trata del reflejo del trabajo conjunto de los países que forman el conglomerado aeronáutico, aportando recursos y capital humano altamente cualificado", añadió Chacón, quien quiso dejar claro que el país cuenta con "voz y voto" en las acciones del grupo.

Motorización

Los principales problemas que experimenta el A400M están relacionados con el sistema de propulsión del avión, basado en unos turbopropulsores de nueva generación (los TP400-D6) que son responsabilidad de un consorcio formado por la española ITP, la británica Rolls-Royce, la francesa Snecma y la alemana MTU.

Según el citado diario, en la actualidad los prototipos de los motores están siendo probados en un C-130 Hércules modificado en las instalaciones de la empresa Marshall Aerospace en Gran Bretaña, donde tienen que superar las 30 horas de tests en tierra y 50 horas en vuelo.

El avión militar A400M, cuya inversión se calcula ahora se aproximará hasta los 3.500 millones de euros hasta el año 2010, tiene objetivo sustituir a los C-130 Hércules y Transall C-160. Según el contrato de lanzamiento, firmado en mayo de 2003, siete países encargaron 180 unidades: 60 para Alemania, 50 para Francia, 27 para España, 25 para el Reino Unido, 10 para Turquía, 7 para Bélgica y uno para Luxemburgo. Luego se han sumado Malasia y Sudáfrica con encargos para 12 aparatos suplementarios.

España lleva la responsabilidad del programa a través de la filial de transporte militar español presidida por Carlos Súarez, aunque la gestión final del A400M depende directamente de la empresa Airbus Military Compnay, ubicada en Toulouse (Francia).



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