Rafael Quintana, director general de Aeroespacio de SENER: "El mercado nacional nos da la oportunidad, luego nuestra obligación es buscarnos la vida"

05/04/2010 (Infodefensa.com) Por A. V. Suárez - Madrid - El Grupo SENER, una empresa cien por cien española, privada y familiar, se ha hecho hueco en los mercados nacional e internacional gracias a la apuesta por nichos tecnológicos cuya excelencia les pone a la cabeza de Europa y del mundo en soluciones como sistemas de actuación de misiles o mecanismos de precisión y guiado de navegación y control en satélites. Con una estrategia de crecimiento permanente y realista, las empresas del Grupo SENER, tienen claro que "el mercado nacional nos da las oportunidades, pero a partir de ahí es nuestra obligación buscarnos la vida", explica a Infodefensa.com Rafael Quintana, director la Unidad Estratégica de Negocios Aeroespacial de SENER Ingeniería y Sistemas.

Quintana recuerda que SENER es una empresa privada "por tanto estamos muy acostumbrados a vivir en el campo competitivo" y siempre "concentrándonos en nichos de excelencia, ser los mejores del mundo para tener un producto que sea creíble y viable". El grupo en su conjunto (el 53% de ITP, 5% de HISDESAT, Energía y Medio Ambiente y SENER Ingeniería y Sistemas) facturó el año pasado 900 millones de euros y empleó a 5.700 personas. Concretamente, el área de Ingeniería facturó 500 millones de euros contabilizándose 2.600 puestos de trabajo.

¿En qué consiste la unidad que dirige?

SENER Ingeniería y Sistemas tiene cuatro áreas estratégicas de negocio. En primer lugar Naval, que tiene relación con Defensa porque uno de los productos es el sistema FORAN de diseño asistido por ordenador de buques, la herramienta que utiliza Navantia y que se vende en el mercado a astilleros de todo el mundo (uno de los más importantes es BAE Systems). En segundo lugar, Energía y Proceso: actividades de plantas de energía, gas y de proceso, proyectos grandes (entre 300 y 400 millones de euros) y de llave en mano. La tercera es Ingeniería Civil donde se hacen proyectos de infraestructura, de transporte, alta velocidad, metros, aeropuertos, etcétera. Y la cuarta es Aeroespacial.

Yo soy el director de la Unidad de Negocio Aeroespacial que a su vez tiene tres mercados: Espacio, Aeronáutica y Vehículos y Defensa.

En el campo Aeroespacial hay mucho de tecnología dual y tratamos de aplicarlos en la mayor cantidad de oportunidades posibles. De hecho, una de nuestras actividades es el desarrollo de los llamamos mercados spin-off, la aplicación de productos aeroespaciales, muchas veces de defensa, en otros campos, aplicaciones de ciencia, como la instrumentación para telescopios, actividades de biomedicina, automatización de procesos de laboratorio y seguidores solares... Son incipientes, no producen un volumen de negocio importante, pero es la tendencia de SENER.

En nuestra compañía quien ha roto campos tecnológicos es Espacio, porque llevamos mucho más tiempo y produce mucha más I+D. Los desarrollos de Espacio se van migrando a Defensa y en lo aplicable hacia Aeronaútica y, finalmente, a los campos tecnológicos en desarrollo.

En general, esto es lo que cubre la Unidad de Negocio Aeroespacial y siempre actividades tecnológicas, lo que realmente motiva a la compañía es trabajar en campos de actividad avanzados.

¿Cuál es la actividad propia de Defensa de SENER Ingeniería y Sistemas?

En Defensa, fundamentalmente, son tres actividades. Sistemas de Actuación en misiles, en lo que SENER a día de hoy es centro de excelencia en Europa y nos gustaría ampliar el espacio geográfico. Estamos en programas importantes de misiles, en algunos de ellos participa España y, por ello, somos parte de los acuerdos de cooperación para esos programas. Pero el 50% de los misiles en los que participamos son trabajo puramente comercial. SENER, por competencia y experiencia, entra como suministrador de contratistas principales.

En segundo lugar, Aplicaciones de Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento (ISR), en la que se enmarcan los sistemas no tripulados.

La tercera actividad es la Integración de Sistemas, como sistemas de misiles y un ejemplo es el Taurus: SENER ha sido el contratista principal de ese sistema y los futuros sistemas como el de Defensa Aérea de Baja Cota de Alta Movilidad, SHORADS, donde SENER está proponiendo una solución a los requisitos del Ministerio de Defensa también como contratista principal.

Si tuviéramos que definir una actividad básica para SENER en Defensa sería en misiles, que es donde queremos desarrollarnos y ser la empresa de referencia en España. Por otra parte, estando en misiles se consigue estar también en un tema hoy muy importante: la exportación.

Gran parte de los productos que nosotros entregamos son para usuarios internacionales y vemos que, en unos momentos en los que los presupuestos son limitados, nos permite mantener la actividad. Sí es cierto que para ello es fundamental el apoyo del Ministerio de Defensa, que lo tenemos. De hecho, en todos los últimos programas de misiles en los que participa España, SENER ha jugado un papel relevante. Ese apoyo del Ministerio de Defensa con sus productos propios permite a SENER extender esa actividad industrial.

¿Cuáles son los clientes internacionales a los que se refiere?

Los clientes internaciones son a través de los contratistas principales porque nosotros somos subsistemistas, no sistemistas... aunque sí hacemos un subsistema completo. Nuestros contratistas son DBD en el misil IRIS-T. Misil que se ha desarrollado por el consorcio de seis naciones europeas entre las que se encuentra España y que se exporta a Austria, Sudáfrica y de forma reciente e importante a Arabia Saudí que ha seleccionado este misil de corto alcance aire-aire para el Eurofighter y del que nosotros tenemos firmado un contrato con DBD específico para crear la sección de control de esos misiles.

También estamos en el misil Taurus, donde el contratista principal es TSG (Taurus Systems GmbH) y del que somos el suministrador del sistema de actuación que está en proceso de exportación a terceros países.

Somos suministradores de Kongsberg para el misil NSM (Naval Strike Misile) y, por tanto, exportamos para el programa noruego y estamos en discusiones para cerrar un contrato de este misil en Polonia, donde ha sido seleccionado como misil de defensa de costa.

También tenemos algún programa conjunto con SAAB Bofors Dynamics y, finalmente, un programa que va a ser muy importante para SENER, el Meteor del que el Consejo de Ministros ha aprobado la fase de producción lo que nos permite trabajar en este misil con MBDA, con quien tenemos magníficas relaciones. El misil Meteor es también un desarrollo financiado por seis naciones europeas que serán usuarios, pero tiene unas expectativas de exportación muy importantes porque es un misil único en el mercado. Las expectativas están ligadas a los tres aviones en los que va a estar integrado: Eurofighter, Gripen y Rafale.

¿Qué está aportando la adquisición de la División de Instrumentación y Sistemas de Nuevas Tecnologías Espaciales de NTE? ¿En qué se ha empezado a trabajar?

La división de NTE adquirida ha pasado hoy en día a ser una empresa que pertenece a SENER llamada NTE-SENER, manteniendo su identidad, su marca comercial. NTE aporta a SENER un complemento en sus actividades en Espacio, en tecnología biomédica y en sistemas para instalaciones científicas, que es un muy buen complemento de las actividades que teníamos en esos campos. Además, mediante su adquisición reforzamos la división de Barcelona.

SENER aporta a NTE la posibilidad de aumentar el portfolio de sus productos incorporando tecnología como la tecnología óptica, permitiendo abordar proyectos de mayor complejidad y volumen y, por tanto, proseguir con el desarrollo de sus campos característicos.

¿Tienen pensado operaciones similares en un futuro próximo?

No hay ninguna concreta a día de hoy, pero no descartamos hacer una operación parecida con estas características, que sea un negocio consistente con las actividades de SENER o que complemente o aporte una capacidad tecnológica adicional. Pueden ser adquisiciones completas o parciales, como en el caso de NTE. O adquisiciones territoriales, con el fin de favorecer la expansión internacional, ya que es una forma de entrar en un país más rápidamente.

¿Podría hablarnos de su participación en el proyecto GAIA de la Agencia Europea Espacial (ESA)?

GAIA es un programa de la ESA, uno de los futuros satélites científicos, y participamos en dos equipos importantes. Uno es el satélite como tal, en la plataforma en la que desarrollamos el sunshield, una sombrilla espacial que se lanza plegada y que se tiene que desplegar hasta un diámetro de 11 metros. Este proceso en sí ya es único, es la primera vez que se hace el despliegue de una estructura de este tamaño, pero además tiene que tener unos requisitos especiales de aislamiento térmico porque la sombrilla blinda el telescopio de la radiación solar. Todo ello hace que sea un proyecto muy especial. El modelo de vuelo se entregará a finales de este año, ya que está en las fases finales de desarrollo y pruebas.

El segundo elemento en el que participamos es en la carga útil, proporcionando el mecanismo de reenfoque de precisión del espejo secundario. Es un mecanismo de cinco grados de libertad con precisiones superiores a la micra y que, además, trabaja a 100º Kelvin, en condiciones criogénicas. Las unidades también se entregarán a lo largo de 2010. GAIA es quizás el proyecto, junto con el SEOSAT (Satélite español de observación de la Tierra), más importante en SENER pero hay otros que se están iniciando.

También suministraron el sistema completo de guiado y control de los satélites Planck y Herschel de la ESA, ¿podría hablarnos de este sistema?

Estos satélites ya han sido lanzados, en mayo del pasado año, y SENER junto a Dutch Space fueron los responsables del sistema de guiado, navegación y control de los dos satélites. Planck era responsabilidad completa de SENER, Herschel de Dutch Space, pero SENER era responsable de la integración completa del sistema en ambos casos. Esta actividad se hizo en Tres Cantos (Madrid) y era la primera vez que una empresa española abordaba como responsable total de un subsistema tan esencial para un satélite. La misión era compleja puesto que se lanzaba, luego tenía que hacer un viaje hasta el punto de Lagrange L2 donde se establece en órbita y empezar a realizar la operación de la carga científica.

Todas esas maniobras y procesos ya se han desarrollado con pleno éxito, con precisiones por encima de lo nominal y en estos momentos el satélite está proporcionando datos a los científicos. En este año se ha cumplido la mitad de la misión y se ha observado más del 85% del espacio. Históricamente SENER fue responsable del ACS (Attitude Control System) del satélite Minisat, pero ésta (Planck y Herschel) es una misión de la ESA científica mucho más importante.

¿En qué otros programas están trabajando en el sector Espacio?

Nuestra estrategia en Espacio se basa en tres aspectos: mecanismos de precisión, guiado de navegación y control y, por último, los sistemas ópticos. En Defensa, el ejemplo de los sistemas de actuación de misiles comparte tecnología con esta área.

En cuanto a mecanismos, además de en GAIA, tenemos una participación en uno de los siguientes satélites científicos de la ESA que es BepiColombo, una misión a Mercurio, donde somos responsables de las antenas de alta y media ganancia. Es un proyecto grande, ganado por concurso, donde somos responsables de todo el subsistema de antena y sus mecanismos de apunte. Su principal característica es que tienen que funcionar a temperaturas muy elevadas. Es todo un reto para SENER.

Además, trabajamos en los satélites Sentinel de la ESA con distintos componentes. Estamos terminando la entrega del mecanismo de apunte de antena que va en el rover del Mars Sample Laboratory, un programa conjunto entre Europa y Estados Unidos. Es muy importante para nosotros la misión ExoMars, misión europea a Marte donde tendremos un subsistema completo. Finalmente, mencionar la tercera generación de Meteosat donde esperamos tener la responsabilidad de distintos mecanismos.

En guiado, navegación y control estamos haciendo una aplicación para un vehículo experimental de reentrada llamado IXV y, finalmente, hay un programa a medio plazo que se llama Proba-3 de la ESA de demostración de tecnologías de vuelo en formación: dos satélites se moverán en formación con una situación relativa muy precisa entre los dos en órbita. SENER, trabajando con otras empresas del sector españolas, liderará la aplicación de vuelo en formación y, por parte del CDTI, se ha propuesto que SENER sea la empresa líder de la misión completa de las actividades propias de vuelo en formación, con lo que sería la primera vez que España lideraría una misión completa de la ESA.

En sistemas ópticos, el proyecto más importante en curso es la cámara óptica del satélite INGENIO, del que SENER se responsabiliza de la carga de pago junto con otras empresas. Es un instrumento de resolución media de 2,5 metros con la característica de que tiene un ancho de traza muy grande, 60 kilómetros, para lo que hay que tener dos telescopios en paralelo.

En el campo de electroóptica, estamos trabajando en la carga de pago complementaria de INGENIO, desarrollando un espectrómetro para una misión en Marte. Además, en fases iniciales, también participamos en un proyecto hispano-ruso para un telescopio, el World Space Observatory, donde vamos hacer una cámara ultravioleta.

¿Cuáles son los proyectos en los que trabaja en sistemas no tripulados (UAS)?

Los UAS para nosotros no es un fin en sí mismo, sino la aplicación de ISR (Aplicaciones de Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento) donde participamos en distintos proyectos, algunos ligados a UAS y otros a otro tipo de plataformas.

Además de proyectos internacionales como son el WIMAAS de la Unión Europea en materia de vigilancia marítima y el también europeo Border Survelliance, hemos participado en un microUAV... siempre con la idea de que el UAS sea una plataforma que genere la información y nosotros estar en la integración de esa plataforma para los usuarios.

De ahí nuestra estrategia de asociarnos con empresas que tienen un vehículo ya probado, de referencia, y tratar de ser su socio industrial en España para facilitar la integración de ese sistema con las necesidades de los usuarios.

¿Hasta el momento sólo se participa como parte de consorcios internacionales en UAS?

Los consorcios nacionales son los que sabemos, entendemos que SENER estará el día que el Advanced UAV pueda ser una realidad. Pero son proyectos a medio plazo.

¿Ven bien posicionado el Camcopter S-100 para su uso por parte de las Fuerzas de Seguridad o las Fuerzas Armadas españolas?

Nos parece que es un magnífico sistema, es real, que se toca, que está en producción y se ha introducido en la Marina de Francia, tanto para aplicación naval y terrestre, y Alemania está a punto de comprarlo para sus corbetas. Es un sistema que permite utilizar una carga de pago del orden de 50 kilos y, por tanto, nos parece que puede cubrir las necesidades de usuarios en España como la Armada o la Guardia Civil. Se trata de una solución que se puede aplicar a día de hoy.

¿Cuál es la facturación de SENER en materia aeroespacial, qué cuota de volumen de negocio ocupa con respeto del total?

En SENER Ingeniería y Sistemas es aproximadamente el 20% de la facturación. SENER ha sido de siempre una empresa muy diversificada, por ello los cuatro campos de actividad mencionados le dan una gran estabilidad y constante crecimiento. Esta situación nos permite abordar con confianza el futuro, fundamentalmente con la estrategia de ser centro de excelencia de determinados productos que nos permita ir al mercado internacional a través de consorcios y asociaciones.

Nos permite también crecer hacia aplicaciones duales, utilizar estas tecnologías en spin off hacia otros campos como la biomedicina, que nos parece que es el siguiente área donde podemos reutilizar las tecnologías que vienen de Defensa, Espacio...

¿Hacia dónde se dirige la estrategia de SENER?

Nuestra perspectiva es la internacionalización, posiblemente el área aeroespacial sigue a SENER en el desarrollo internacional. En la actualidad, nos interesa Oriente Medio en general y Polonia, entre otros.

En Defensa, específicamente, en el campo de los misiles seguiremos siendo subcontratistas de primer nivel de los sistemistas principales o integradores de soluciones completas, en el caso del mercado nacional, siendo la interfaz entre el sistema que forzosamente lo va a producir un contratista principal y el usuario que son las Fuerzas Armadas, que siempre tienen unos requisitos especiales. Y el mejor ejemplo es el Taurus.

He mencionado como un proyecto a medio plazo el futuro SHORADS de alta movilidad donde estamos proponiendo al Ministerio de Defensa una solución que llamamos Sagitario que permite cumplir los requisitos operativos con un sistema probado y que integraría la capacidad de utilizar dos misiles AMRAAM e IRIS-T simultáneamente. Esperamos que cuando sea posible, por temas presupuestarios, sea nuestro gran sistema así como esperamos que tengamos posibilidades de coordinarlo en el campo de la exportación dentro de un consorcio para no sólo vivir de los presupuestos nacionales sino buscar una extensión hacia otros mercados que facilite que esto sea viable. El mercado nacional nos da las oportunidades, pero a partir de ahí es nuestra obligación buscarnos la vida.