Los programas especiales de armamento registran una desviación de coste del 32
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Los programas especiales de armamento registran una desviación de coste del 32

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(Infodefensa.com) N. F., Madrid – Los 19 programas especiales de armamento (PEAs) adquiridos para modernizar las Fuerzas Armadas españolas registran en conjunto una desviación de coste del 32 por ciento respecto al importe contratado y ascienden en la actualidad a 31.631,8 millones de euros, según un informe de difusión limitada del Ministerio de Defensa al que ha tenido acceso Infodefensa.com.

Las desviaciones representan en importe actualizado a diciembre de 2010 un sobrecoste total de 7.672 millones de euros, según los datos oficiales.

El documento señala que el programa con mayor desviación en porcentaje es el referente a la adquisición de nuevos helicópteros NH-90, que acumula un incremento de gasto del 95,5 por ciento, seguido del avión de transporte A400M con un 59,1 por ciento, el Buque de Acción Marítima (BAM) con un 38,8 por ciento, el Buque de Proyección Estratégico (BPE) con un 28,2, el avión de combate EF 2000 (Eurofighter) con un 26,6 por ciento y el carro de combate Leopardo 2E con un 25,7.

Eurofighter, la mayor desviación en euros

En términos absolutos, el programa de adquisición que más desviación de coste ha experimentado desde su firma  es, con gran diferencia, el del Eurofighter, que asciende ya a 11.718 millones de euros (según importe actualizado a diciembre de 2010), es decir 2.463,30 millones más de lo firmado en 1997.

A continuación, le sigue el avión de transporte A400M con 5.493 millones de euros (2.040 más de lo contractual), el helicóptero NH-90 con 2.463 millones (1.203 millones más que lo firmado) y el carro de combate Leopardo con 2.399,40 millones (456.6 millones más que lo firmado en 1997 cuando se rubricó el contrato).

Por el contrario, el único programa de adquisición de material firmado por Defensa con diferencia de coste negativo (es decir, que ha costado menos de lo firmado originalmente) es el avión apagafuegos para la Unión Militar de Emergencia (UME) que se firmó por 44,5 millones y su importe actual asciende a 40,5 (7,80% menor).

 

Podrían costar hasta 31.600 millones

El importe contractual de estos 19 programas especiales para la modernización del material de las Fuerzas Armadas firmados entre 1997 y 2011, es de 23.959,6 millones pero el incremento de coste que han sufrido aumenta su monto actual a los 31.631,8 millones, según la documentación del Ministerio de Defensa. En diciembre de 2009, cuando el Ejecutivo aprobó la última versión de precios y coste, estos programas se habían incrementado hasta los 26.692,5 millones de euros.

El documento de difusión limitada, al que ha tenido acceso Infodefensa.com, señala, sin embargo, que el coste final de estos programas oscilará entre los 31.284 y los 36.876 millones de acuerdo con diversos escenarios, lo que representaría una desviación de cerca del 50 por ciento en el peor de los casos, subraya. Estos escenarios dependen de que se materialicen las estimaciones máximas de las desviaciones al alza en modificaciones, partidas abiertas, etc.).

El documento explica que la desviación entre el último máximo autorizado por el Consejo de Ministros (2009) y la previsión actualizada (diciembre de 2010) asciende a 4.939.3 millones de euros que se reparte de la siguiente manera: 3.400 millones por modificaciones (14 %); 3.200 millones de incremento por revisión de precios (13 %); y 1.100 millones por incremento por partidas abiertas, contratos adicionales, etc. (5 %).

4.300 millones más caros desde 2009

El análisis realizado por los técnicos de la Secretaria de Estado de Defensa ilustra que Defensa no podrá hacerse cargo de los pagos previstos, y calcula que hasta ahora se ha satisfecho cuantías por importe de 4.267 millones de euros.

Las principales causas de las desviaciones son las derivadas de modificaciones contractuales (3.267,9 millones, 14,4 %); las revisiones de precio (3.267,8 millones, 13,64 %) y las partidas abiertas (979,7 millones, 4,09 %).

Por ello, afirma que el departamento de Carme Chacón “está tramitando una nueva reprogramación” con el fin de ajustar los techos presupuestarios y los calendarios de pago y aumentar, al mismo tiempo, la financiación del Ministerio de Industria. “De esta forma se pretende adaptar mínimamente las necesidades financieras del Ministerio a la realidad presupuestaria”, agrega el documento.

No hay dinero hasta 2016

La razón es clara. En cualquiera de los escenarios (optimista y pesimista), el Ministerio de Defensa no puede hacer frente a sus obligaciones financieras derivadas de estos programas hasta 2016 y eso si no se tiene en cuenta las necesidades financieras derivadas de los demás programas de adquisición y de sostenimiento.

Desde la perspectiva optimista, el Capítulo 6 del Ministerio de Defensa (Inversiones Reales) tiene un déficit entre 2011 y 2016 de 1.833 millones de euros y a partir de 2017 se producirá un pequeño margen de financiación que no se intensificará hasta el ejercicio 2023. Concretamente el superávit acumulado entre los años 2017 y 2025 ascendería a 3.632 millones de euros, según el informe obtenido por Infodefensa.com.

Desde la perspectiva pesimista, que se mantenga la crisis económica actual, al no recuperarse en el 2018 los techos de financiación del ejercicio 2008, y establecer únicamente el incremento constante del 3,5 % desde 2014, la situación ante la que nos enfrentamos supone la existencia de un déficit acumulado durante estos años de 9.813 millones de euros.

En estos cálculos no se recogen eventuales nuevos programas especiales de adquisición de armamentos como los helicópteros EC-125, la segunda fase de los Buques de Acción Marítima (BAM) y, en su caso, el VBR 8x8.



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