Tecnobit se adjudica un contrato para suministro de equipos de duelo por 1,5 millones

(Infodefensa.com) Madrid – La empresa española Tecnobit se ha adjudicado un nuevo contrato del Ejército de Tierra para el suministro de Simuladores de Combatiente Individual por un importe de 1,52 millones de euros.

Según informan desde la compañía, estos simuladores han demostrados ser una herramienta muy eficiente, y cada vez más necesaria, para el adiestramiento militar, ya que el equipo simula un enfrentamiento real y permite a los participantes interactuar con todos los elementos presentes en el campo de batalla.

“Este sistema no solo supone un importantísimo ahorro de costes, al eliminar el material necesario para la realización de ejercicios tácticos de combate real, sino que, al mismo tiempo, facilita un entrenamiento muy eficaz de la tropa sin el riesgo del daño físico”, explican.

El simulador, destinado a la instrucción táctica y de tiro de combatientes individuales, está configurado con una serie de sensores sobre el cuerpo de los combatientes y un emisor láser montado sobre el arma real, complementados con una estación de análisis sobre PC portátil que permite el almacenamiento y posterior análisis de las informaciones obtenidas durante el ejercicio.

La versión instrumentalizada incorpora un GPS y radio en una mochila que permite el control en tiempo real desde una Estación de Seguimiento del Ejercicio. Con esta configuración, el simulador registra, con fiabilidad y precisión, la posición de cada soldado durante el ejercicio de adiestramiento, los disparos realizados, la munición disponible, e incluso las condiciones en las que el participante se encuentra y la capacidad que tiene para disparar tras los impactos recibidos.

Otra de las ventajas del simulador de Tecnobit es que es compatible con otros simuladores de duelo de vehículos y blancos, lo que permite la recreación del ejercicio con diferentes tipos de participantes.

Tanto el Ejército del Aire como la Infantería de Marina han mostrado interés por contar con estos sistemas, que también han despertado el interés de países como Brasil, Chile o Colombia.