La UE quiere abrir las cadenas de suministro de Defensa a todas las pymes europeas

(Infodefensa.com) G. Soriano, Madrid – “Europa necesita una base industrial y tecnológica de la defensa más competitiva, innovadora, sostenible e integrada para desarrollar y mantener capacidades de defensa”, y las pymes, claves en la cadena de suministro y como fuentes de innovación y catalizadores de la competitividad, son uno de los instrumentos clave ello. Es un de las conclusiones a las que se llegó ayer en el primero de los dos días de debates del Consejo Europeo sobre Defensa y seguridad que acaban hoy.

Es la primera vez en cinco años que este organismo de la Unión Europea debate sobre defensa. Las discusiones, como destaca su presidente, Herman Van Rompuy, se están centrando en buena media “en relación a la industria y al empleo”, uno de los tres ejes de actuación en los que se ha estado trabajando para preparar esta cita, junto con las capacidades de defensa y las operaciones conjuntas.

Según la información oficial facilitada por el Consejo Europeo “es preciso reforzar una base industrial y tecnológica de la defensa para asegurar la efectividad operativa y una seguridad de suministro, a la vez que sigue siendo mundialmente competitiva y fomenta el empleo, la innovación y el crecimiento en toda la UE”.

Para asegurar esa competitividad a largo plazo y el suministro de las “modernas capacidades necesarias”, concreta el documento con las conclusiones de ayer, “resulta esencial mantener los conocimientos especializados en materia de investigación y tecnología de defensa”. Por esta razón “el Consejo Europeo invita a los estados miembros a que incrementen la inversión en programas de investigación cooperativa y maximicen las sinergias entre investigación nacional y de la UE”.

En este punto destaca la importancia de aumentar el fomento de “la investigación sobre doble uso” civil y militar, que pueden, de paso, mejorar otros ámbitos, como el de las tecnologías de eficiencia energética.

Normalización de certificaciones

Otro pilar importante en estos objetivos es el desarrollo de procedimientos de certificación y normalización para equipos de defensa, de modo que se puedan reducir costes, armonizar la demanda y fomentar la interoperabilidad. Para ello, “junto con la Comisión y los Estados miembros, la Agencia Europea de Defensa desarrollará asimismo opciones para reducir los costes de la certificación militar, con inclusión del reconocimiento mutuo entre Estados miembros de la UE”. A mediados del año entrante el Consejo deberá ser informado sobre los pasos que se van dando en esta línea.

Un capítulo especial es el dedicado a las pequeñas y medianas empresas (pymes) del sector: “Un elemento importante en la cadena de suministro de la defensa, una fuente de innovación y catalizadores clave de la competitividad.

El Consejo Europeo subraya en esta materia la “importancia de un acceso transfronterizo al mercado para las PYME”, y destaca que deberían aprovecharse plenamente las posibilidades que ofrece la legislación de la UE en materia de subcontratación y licencias de transferencias en general, “e invita a la Comisión a que investigue las posibilidades de medidas adicionales para abrir las cadenas de suministro a las PYME de todos los Estados miembros.

Igualmente recomienda llegar a acuerdos que aseguren el suministro para mejorar el mercado interior de la defensa.

Los problemas de los recortes

El Consejo Europeo se centró ayer en una evidencia que lleva varios años afectando a la industria militar: “Los presupuestos de defensa en Europa están sometidos a recortes, lo que limita la capacidad para desarrollar, desplegar y mantener las capacidades militares. La fragmentación de los mercados europeos de la defensa perjudica a la sostenibilidad y a la competitividad de la industria europea de la defensa y de la seguridad”.

En la sesión de ayer las discusiones se centraron en gran parte en “identificar las formas y los medios que permitan, a los miembros que así lo quieran, cooperar mejor en relación a los activos de defensa”, en palabras de Van Rompuy. Esta alianza se refiere al “desarrollo, la adquisición, el uso y el mantenimiento de esos activos”.

De este modo, apunta el presidente del Consejo Europeo, se logra racionalizar la inversión mientras se fomenta el uso de tecnologías de vanguardia por parte de los países europeos. Y como ejemplo cita los esfuerzos de colaboración centrados en “dispositivos de última generación dirigidos por control remoto, o drones, o satélites de comunicaciones de última generación”.

A éstos añade las medidas que se están tomando encaminadas a la mejora del repostaje de aviones en el aire y contra los ataques cibernéticos, que son las otras dos grandes áreas en las que se centra actualmente el trabajo de la Agencia Europea de Defensa (EDA).

Van Rompuy remarca que con estos proyectos concretos no sólo se trata de cubrir las necesidades de seguridad, “sino que también proporcionarán trabajo a la industria de defensa, lo que también supone empleo”.

En esta línea, ha apuntado, “las inversiones a largo plazo pueden ayudar a impulsar la innovación, la tecnología, permitiendo mayores beneficios”.

También forma parte del debate de estos días la política de seguridad y defensa y “la mejora del sistema de financiación”. El presidente del Consejo Europeo destaca sobre este asunto la importancia de lograr una unión bancaria que facilite la disponibilidad de fondos.

Hoy, segundo y último día de debates sobre Defensa y seguridad en el Consejo Europeo, las discusiones se centran en política exterior, incluidos los últimos sucesos acontecidos en Ucrania, donde las revueltas se suceden, y también sobre el pacto para el crecimiento del empleo.

Foto: Ginés Soriano / Infodefensa.com