Indra, Thales e INTA participarán en la modernización de los Chinook

La modernización de los 17 helicópteros CH-47D Chinook del Ejército de Tierra es uno de los programas prioritarios recogidos dentro del nuevo ciclo inversor del Ministerio de Defensa. Estados Unidos ha dado ya el primer paso para poner en marchar este proyecto valorado en 1.055 millones de euros y liderado por Boeing. A falta de autorización al techo de gasto del Consejo de Ministros, el programa gestionado por la DGAM prevé la actualización de los helicópteros durante los próximos siete años, entre finales de este 2018 y 2025, y la participación de empresas españolas como Indra, Thales España o el INTA.

El calendario marcado recoge el traslado del primer lote de material a la factoría de Boeing en Ridley Park en Filadelfia antes del primer trimestre de este año. Durante 2018 y 2019, la factoría recibiría cuatro unidades y los tres años siguientes llegarían tres unidades cada año hasta completar los 17 aparatos. De acuerdo con este cronograma, los tres últimos helicópteros transformados regresarían a España en 2025.

En un artículo de la publicación RED, el jefe del programa de renovación del helicóptero de transporte CH-47, el coronel Luis Maciá, explica la importancia de finalizar la modernización de la versión Delta a la Foxtrot en 2025 . "Boeing, una vez entregados los varios centenares de pedidos que tiene contratados hasta la fecha, tiene previsto cerrar ese año la línea de fabricación para dedicarse a preparar la fase de producción en serie de una nueva versión más avanzada del CH-47, que debería prolongar la vida del Chinook hasta 2060", detalla.

Primeras unidades en 2021

El salto a la versión F incluye una nueva estructura fabricada en materiales compuestos y la aviónica totalmente digital. De esta forma, solo se aprovecharán los dos motores turboeje Honeywell, la transmisión principal y de combinación. Además, los aparatos podrán operar a bordo de los buques de la Armada española mediante la incoporación de un freno de motor en la transmisión de combinación, lo que reduce el tiempo que tardan las palas en detenerse.

Las cuatro primeras unidades, que llegarán en 2021, contarán con la última configuración de guerra electrónica de la US Army. También incorporarán el Sistema de Arquitectura de Aviónica Común (CAAS) de Rockwell Collins con modernos subsistemas de comunicación, navegación y misión. A partir de la recepción del segundo lote en 2022, uno de los helicópteros se convertirá en un prototipo para evaluar y certificar equipos críticos de fabricación nacional en el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA).

Participación española

Por su parte, la multinacional española Indra será responsable del componente de guerra electrónica que incluye sistema de detección y alerta de misiones, lanzadores de bengalas, etc. Los Chinook también recibirán los nuevos equipos de comunicaciones por salto de frecuencia PR4G de Thales, que ya operan en otras plataformas de las Famet. Indra además aspira a obtener dos contratos más para el sistema automático de planeamiento de misión (AMPS) y la modernización del actual simulador y entrenador del helicóptero.

En el caso del AMPS, la revista recoge que consiste en "un software externo al helicóptero permitirá la preparación en tierra de las misiones operativas, que a la vez será de gran ayuda para la gestión logística de la aeronave. El programa de la misión se carga en el software del aparato y, una vez concluida la misión de vuelo, se descargan los datos resultantes para su análisis".

También se baraja poder disponer de un banco automático para detectar anomalías y fallos en los diferentes equipos de a bordo, a semejanza de los que han sido adoptados para el NH90 y el Tigre.

Apoyo logístico

El acuerdo además establece la opción de contar con un sistema de apoyo logístico conocido como Logística Basada en el Rendimiento (PBL, por sus siglas en inglés). Este concepto, diseñado por Boeing, externaliza la gestión y la logística del almacen para los repuestos de material, lo que disminuye el número de referencias y cantidades en el almacén. El objetivo principal es reducir los plazos para la reparación de los equipos averiados que, en ocaciones, se prolongan durante un año.