Thales alcanza la mayor cartera de pedidos militares de su historia: 35.200 millones

El incremento en los presupuestos de defensa y seguridad de los principales clientes de la multinacional de electrónica francesa Thales le ha permitido obtener unos resultados récord. La empresa, que en 2023 ha logrado unas ventas en esta área un 7% mayor que un año antes, cerró el último ejercicio con suficientes encargos como para mantener su actividad durante 3,6 años. En total, su cartera de pedidos se situó en 35.200 millones de euros, la cifra más alta de su historia.

El segmento de Defensa y Seguridad de la empresa se ha mantenido en 2023 “con una demanda sólida y continua”, de acuerdo con el balance que acaba de publicar. Las ventas en esta área ascendieron a 9.796 millones de euros en el último ejercicio. Se trata de un crecimiento del 7%, respecto a 2022, en el que, precisa la fuente, se “refleja el aumento gradual de nuestra capacidad de producción, así como el dinamismo de muchas líneas de productos, en particular sistemas de inteligencia, vigilancia y reconocimiento, sistemas de información crítica, sistemas integrados para la protección del espacio aéreo, radares de superficie, sistemas de superficie para buques y soluciones de ciberdefensa”.

Los beneficios antes de intereses e impuestos del segmento de Defensa y Seguridad que la empresa ha logrado extraer de estas cifras ascienden a 1.251 millones de euros (el 12,8% de las ventas), frente a 1.179 millones de euros en 2022, de modo que supone un 7,3% de incremento en un año.

En el nuevo balance, la empresa destaca “un importante contrato de1.800 millones de libras [algo más de 2.100 millones de euros al cambio actual] con el Ministerio de Defensa del Reino Unido para garantizar la disponibilidad y resistencia a largo plazo de los equipos Thales en la flota del Reino Unido”, denominado contrato MSET (Maritime Sensor Enhancement Team). Además cita, entre los 25 grandes encargos que ha recibido en el ejercicio, por encima de los 100 millones de euros, el pedido recibido en el primer trimestre de un subsistema submarino para un cliente militar que no ha revelado; el de un conjunto de sensores y un sistema de guerra sobre el agua para las nuevas fragatas belgas y holandesas, el pedido por parte de Indonesia de 13 radares GM400 Alpha junto a un sistema de control y mando aéreo Skyview y la modificación del contrato para el suministro y soporte de radios tácticas Contact de próxima generación para el ejército francés, todos en el segundo trimestre; un contrato para la modernización de media vida de las fragatas francesas e italianas de clase Horizon y otro para la extensión de media vida de un sistema de radar multifuncional para un cliente militar no revelado, en el tercer trimestre; y, dentro del último trimestre de 2023, el suministro de sistemas de simulación para el centro de formación de pilotos Rafale de los Emiratos Árabes Unidos; la notificación por parte de la Agencia Francesa de Compras de Defensa (DGA) de la quinta fase de producción del programa Rafale, para el suministro de 42 aviones destinados a la Fuerza Aérea y Espacial Francesa; la instalación del sistema de gestión de combate Tacticos, sonares, radares de vigilancia aérea y control de tiro y un sensor infrarrojo de 360° para el programa de fragatas Miecznik de la Armada polaca; el segundo tramo del pedido realizado por Indonesia en 2022 para la compra de 42 aviones Rafale (18 aviones); la financiación por parte de la DGA de una de las fases de desarrollo del programa Rafale según el estándar F4 (que cubre determinadas funcionalidades del radar RBE2 y de la suite de guerra electrónica Spectra) y el desarrollo del futuro radar RBE2 XG destinado al Rafale estándar F5; la entrega e instalación de radares de largo alcance fijos multimisión (MM/F) Smart-L; la siguiente fase de la renovación de varios radares de las Fuerzas Armadas francesas y el pedido de un nuevo sistema de mando y control de operaciones aeroespaciales en el marco de la quinta etapa del programa Sccoa; un nuevo contrato en el marco del programa militar francés de telecomunicaciones Syracuse IV para el suministro de estaciones de comunicaciones por satélite On-The-Move, que se integrarán en los vehículos blindados Scorpion (Griffon y Serval); un contrato bajo el programa francés de vehículos blindados multifunción EBMR (también de la iniciativa Scorpion) para el suministro de electrónica de a bordo para vehículos nuevos encargados al consorcio temporal formado por Nexter, Arquus y Thales, y una nueva modificación del componente aeronáutico del contrato con la DGA de comunicaciones tácticas digitales completas y de teatro Contact.

“Nuevo récord”

En total, y gracias particularmente a estos grandes pedidos, la cartera de nuevos encargos en Defensa y Seguridad ha experimentado “un nuevo récord”, al alcanzar los 14.139 millones de euros, frente a los 13.959 millones de euros de 2022. De este modo, la evolución equivale a un incremento del 2% en esta variable. La cartera acumulada de pedidos en el mismo segmento alcanzó el 31 de diciembre igualmente un nuevo récord de 35.200 millones de euros, lo que supone un aumento del 14% y equivale a 3,6 años de ventas “para respaldar su crecimiento en los próximos años”, de acuerdo con el balance ofrecidopor la empresa.

Como tendencia, el balance de Thales recoge cómo “los aumentos anunciados en los presupuestos militares de los principales clientes del grupo siguen impulsando la demanda en el sector de defensa”. Y recuerda que en defensa y seuridad cuenta ahora “con una cartera de pedidos sin precedentes en la historia del grupo”. Este segmento, augura la fuente oficial de la empresa, “seguirá creciendo en 2024, manteniendo un margen EBIT [ganancias antes de intereses e impuestos] que se encuentra entre los más altos del sector”, en alusión al citado 12,8%.

Reubicación

En cuanto al negocio espacial, la empresa apunta que se beneficia de “perspectivas de crecimiento favorables para la mayoría de sus actividades, en particular la observación, la exploración, la navegación, las telecomunicaciones y los servicios militares”. Sin embargo, añade, el negocio de las telecomunicaciones comerciales enfrenta desafíos debido a una demanda estructuralmente más débil. Por este motivo, justifica, “el grupo anuncia un proyecto de plan de adaptación en Thales Alenia Space que abarca alrededor de 1.300 puestos de trabajo, de los cuales 1.000 en Francia, que se reubicarán dentro del grupo, sin salidas forzosas”. Esas redistribuciones, en consulta con los representantes de los trabajadores, se llevarán a cabo previsiblemente a lo largo de 2024 y 2025. Durante ese mismo período están previstas 7.000 contrataciones en Francia para hacer frente al fuerte crecimiento esperado en los demás segmentos de negocio de la compañía. Este plan debería restablecer de forma sostenible la rentabilidad del negocio espacial con el objetivo de un margen EBIT de alrededor del 7% a medio plazo, según los planes de la empresa. En consecuencia, el segmento aeroespacial debería registrar un crecimiento orgánico de las ventas, pero a un ritmo más lento que en 2023, añade la fuente.