Los F-18 españoles van equipados con misiles AMRAAM y Sidewinder para superioridad aérea

(Infodefensa.com) Madrid – Los cuatro cazabombarderos españoles F-18, desplegados para participar en el cierre del espacio aéreo libio, están armados con misiles aire-aire de medio alcance AMRAAM y de corto alcance Sidewinder para superioridad aérea y operarán desde la base italiana de Trapani, al oeste de Sicilia, y que está integra en el sistema de la Alianza Atlántica.

Fuentes militares confirmaron a Infodefensa.com que los F-18 españoles no han sido asignados a la primera fase de la operación, la eliminación de las defensa antiaéreas libias, imprescindible para asegurar la superioridad aérea de los miembros de la coalición. Los cazas españoles, pertenecientes al Ala 12 del Ejército del Aire, tendrá como misión principal el derribo de aquellos aviones o helicópteros libios que no cumplan la Resolución 1973 aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU.

Despliegue de la EADA

Los aviones de combate españoles despegaron el sábado por la tarde de la base aérea de Torrejón de Ardoz (Madrid) con destino a la base de Decimomannu, al sur de la isla italiana de Cerdeña, como etapa intermedia hasta su despliegue definitivo en Trapani. Estaban acompañados por un avión cisterna para repostar en vuelo Boeing 707, perteneciente en este caso al Grupo 47 del Ejército del Aire.

El destacamento, que incluye unos 150 hombres, cuenta también con efectivos de la Escuadrilla de Apoyo al Despliegue Aéreo (EADA). En los próximos días se unirá un avión de vigilancia marítima CN-235 especialmente equipado la detección de objetivos en el ambiente marino y el seguimiento de objetivos.

Otros apoyos españoles

El Gobierno español también ha ofrecido para la operación sobre Libia la fragata F-104 Méndez Núñez, una de las más modernas de la Armada y capaz de controlar las operaciones en una amplia zona por sus modernos radares SPY-1D, y el submarino S-74 Tramontana. La Méndez Álvaro intervino en la liberación en noviembre de 2009 del pesquero Alakrana, secuestrado durante 47 días por piratas somalíes,  ha colaborado estrechamente con grupos de combate estadounidenses y británicos, según informa el diario El País.

Por su parte, el Tramontana es un submarino de la clase S-70 con 26 años de antigüedad y que participó en 2002 en la recuperación del islote de Perejil.

Las fuentes militares consultadas afirmaron que ambas unidades, la F-104, con base en Ferrol (A Coruña), y el S-74, con base en Cartagena (Murcia), estarán listos para integrarse en la coalición internacional a partir del domingo por la noche.

En total, la aportación española a la misión en Libia suma casi el medio millar de militares, de los que unos 150 pertenecen al Ejército del Aire y el resto de la Armada.