El Gobierno español apoya a la empresa Airbus y al programa A400M

El ministro español de Exteriores, José Manuel García-Margallo, expresó este lunes su preocupación por las repercusiones que puede tener el accidente del A400M en Sevilla y mostró su apoyo a una empresa que da trabajo a 50.000 españoles.

Durante una rueda de prensa en Viena, García-Margallo señaló que espera que la comisión de investigación que se ha puesto en marcha por los Ministerios de Fomento y Defensa “llegue a una conclusión rápida, y que el proyecto, si me permiten el símil, vuelva a tomar el vuelo a una gran velocidad, porque es importante para España y Europa".

Añadió que el A400M es un proyecto europeo “de enorme importancia” para la industria europea y también para España. "Es un proyecto puntero en la industria europea, en un momento en que la industria tiene que hacer un enorme esfuerzo para competir”, afirmó, aunque apuntó que el tema le preocupaba porque Airbus da trabajo a 50.000 españoles.

Sobre la investigación del accidente, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, aseguró que los Ministerios de Fomento y de Defensa "están llevando a cabo “un proceso muy riguroso”. Indicó que el programa es “muy importante para el país”, por lo que “tenemos que ser todos muy rigurosos, trabajar mucho y hacerlo con la máxima coordinación". La vicepresidenta añadió que, “por prudencia”, no se adelantará ningún detalle sobre cualquier conclusión o acontecimiento relacionado con el accidente.

Del proyecto de Airbus con otros países señaló que hay que tener en cuenta "el especial reparto accionarial de la empresa", que obligará a estar muy en contacto a todos los gobiernos europeos que participan en la compañía.

También se refirió al accidente la presidenta en funciones de la Junta, Susana Díaz, que pidió una información “rápida y con rigor” sobre el suceso. Tras reiterar sus condolencias a los familiares de las víctimas y desear la pronta recuperación de los heridos, Díaz agradeció la "pericia" del piloto del avión, que fue capaz de aterrizar en un lugar sin ningún peligro para la población civil, a pesar de estar a escasos metros de una factoría de Coca Cola y de un centro comercial, así como la actuación de los ciudadanos anónimos que ayudaron a los heridos.

Foto: EFE / Ballesteros