Coronel Zamorano: "Los IED son cada vez más complejos, letales y difíciles de detectar"

El coronel José Zamorano González es el director del Centro de Excelencia contra Artefactos Explosivos Improvisados (C-IED COE), creado en Madrid en 2010 con financiación y acreditación de la OTAN. Como cabeza de este centro, el coronel es el principal promotor del II Congreso Internacional sobre Tecnologías C-IED, que comienza hoy en la capital española con la participación de relevantes expertos civiles y militares tanto nacionales como internacionales.

¿Con qué objetivo principal comienza este II Congreso sobre IED?

El evento tiene la intención de reunir en un mismo foro a los principales actores implicados en el desarrollo de tecnología C-IED: los usuarios (fuerzas militares y policiales y servicios de inteligencia) y los representantes de la industria de defensa y de organizaciones de investigación y desarrollo tecnológico, con el objetivo de lograr un intercambio de información fluido entre ellos, de forma que se obtenga una idea clara de las necesidades reales de los usuarios que permita a la industria de defensa y a las agencias de investigación y desarrollo focalizar su trabajo en la dirección que asegure una correcta adecuación de la tecnología a las características de la amenaza que suponen los IED.

¿Cuáles son los principales atractivos de las jornadas?

Estas jornadas representan una de las escasas oportunidades para encontrar reunidos en un mismo foro desde los usuarios finales de la tecnología C-IED hasta el personal de las organizaciones que la desarrollan, pasando por los industriales que la fabrican. Esto permite una comunicación directa y fluida entre ellos, facilitando la correcta orientación de los procesos de desarrollo, de manera que el producto final se adapte desde el principio tanto a la amenaza como a las necesidades reales para hacerle frente, evitando retrasos en su implementación y una reducción de los costes que supondría la inclusión de modificaciones durante las etapas finales de desarrollo.

Asimismo, la exposición y las demostraciones del material C-IED permiten obtener una imagen clara y precisa de las capacidades de los últimos desarrollos en tecnología C-IED. La participación de empresas es superior a la de año 2014 y se podría resumir en 20 empresas presentes en la exposición y dos universidades españolas, así como una nutrida representación de delegados de más de 20 países de la OTAN y fuera de la OTAN.

¿Qué diferencias y novedades incorpora con respecto a la edición del año pasado?

La principal novedad es la inclusión de una jornada inicial de carácter restringido, dedicada a la exposición detallada de las características actuales de la amenaza IED, así como su evolución potencial. Esta jornada permitirá a los asistentes hacerse una idea mucho más clara de los requisitos que la tecnología C-IED deberá satisfacer para ser realmente efectiva frente a los IED.

Además, el empleo de instalaciones del Ministerio de Defensa implica una disminución de los costes de ejecución de las jornadas, permitiendo una reducción de las cuotas de inscripción tanto del personal como de las empresas y organizaciones asistentes, facilitando una mayor participación.

Y por vez primera este evento ha sido organizado conjuntamente con el Centro de Excelencia EOD de Eslovaquia y se pretende celebra en años alternos en España y en dicho país.

¿Cuáles son los mayores retos a los que se enfrentan los profesionales que luchan contra los IED?

El carácter global de la amenaza IED y la rapidez en el intercambio de información, facilitada por el empleo de las redes sociales e internet, unida a la facilidad para obtener los componentes necesarios para la fabricación de IED, hace que los artefactos empleados sean cada vez más complejos y letales, de forma que se adaptan rápidamente a los procedimientos empleados en la lucha C-IED.

Esta evolución constante en el diseño de los artefactos hace que se estén encontrando IED más difíciles de detectar con la tecnología disponible actualmente y con dispositivos de inicio más precisos y difíciles de neutralizar.

¿Hacia dónde va la tecnología en este campo?

En la parcela de la derrota del artefacto, la tecnología C-IED se orienta hacia dispositivos y sensores manejados por control remoto que permitan la detección y neutralización a distancia de todo tipo de IED, minimizando los riesgos del personal que realiza estas tareas.

En el campo de ataque a las redes que emplean IEDs, la tendencia es emplear tecnología que facilite la obtención, análisis e intercambio de datos biométricos y forenses en un plazo de tiempo lo más reducido posible para definir de forma detallada la estructura y componentes de estas redes. La finalidad principal es actuar en tiempo y lugar sobre los centros neurálgicos de estas redes para neutralizar lo antes posible la amenaza.

En lo concerniente a la preparación de la fuerza, se centra en el desarrollo de simuladores que recreen detalladamente las acciones a realizar durante un incidente con IED y las actividades y estructura de las redes que emplean este tipo de artefactos.

Foto: Infodefensa.com