Aire instala diez nuevos refugios en Morón para sus Eurofighter

El Ejército del Aire trabaja desde el pasado 25 de junio en la instalación de diez nuevos refugios para sus cazas de combate Eurofighter del Ala 11, ubicada en la base aérea de Morón de la Frontera (Sevilla). La tarea del montaje ha sido asignada al Segundo Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo (Seada), unidad de referencia en ingeniería militar de la Fuerza Aérea, con base también en el acuartelamiento sevillano.

En los trabajos cuenta con el apoyo técnico de la firma norteamericana Big Top Shelters que acumula una larga experiencia en este tipo de material. El Mando de Apoyo Logístico (Malog) adjudicó a esta empresa el expediente para el suministro de los equipos.

El personal de Seada completa un refugio cada dos días, a un ritmo de trabajo estándar y con unas condiciones meteorológicas favorables. Si se suma la primera semana de planeamiento, está previsto que en un mes finalice el montaje y entren en servicio los nuevos refugios de los 'Gallos' de Morón.

Renovación de los refugios

Estos nuevos refugios forman parte de un programa puesto en marcha por la Fuerza Aérea para modernizar las estructuras que acogen a sus aviones de combate. El año pasado se instalaron 26 refugios en el Ala 15 de Zaragoza y otros 24 en el Ala 12 de Torrejón de Ardoz, en ambos casos para los cazas F-18, que ya están en servicio.

El Ejército del Aire explica a Infodefensa.com que "la finales de dotar a las bases con estas instalaciones es la de reducir el desgaste que las inclemencias atmosféricas pueden provocar en un material tan delicado por su alta tecnología como son los aviones de caza".

Además, añade, "hace más llevadero el trabajo del personal de tierra en torno a sus sistemas de armas, circunstancia ésta muy de agradecer en los inclementes veranos de la campiña andaluza, donde se pueden superar los 40 grados".

Características de la estructura

Los refugios tienen 17 metros de ancho por 23 de largo y ocho de alto. Están formados por arcos de acero que mantienen una tela diseñada especialmente que filtra el 99% de radiación UV A y B. El entramado produce una diferencia de temperatura de hasta 15ºC con el exterior, que redunda en una mayor vida de la pintura como de los componentes electrónicos. Estos últimos, los más costosos.

El Ejército del Aire también detalla que otra característica del material de cubierta es "su capacidad de retardante de las llamas, lo que aporta, además de la habitabilidad, un plus de seguridad, tanto a tripulaciones como a personal de tierra en sus labores diarias".