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La industria española y el post-Covid
La industria es uno de los sectores más afectados por la crisis del coronavirus y también será, según los expertos, un motor fundamental para una rápida recuperación de la economía en la etapa ya conocida como post Covid.
En un artículo publicado en Infodefensa.com, el analista de Defensa Enrique Navarro repasa al principio la situación económica de los principales países europeos, incluido España, antes del inicio de la pandemia en China y las políticas dirigidas por el Banco Central Europeo (BCE).
Navarro aborda, a continuación, el impacto de coronavirus en la economía española y las perspectivas de cara a los próximos años. “La tecnología y la industria, son aquellos sectores que más asegurarían la recuperación económica en el corto plazo, y que además le darían mayores dosis de estabilidad a nuestra economía. Sin embargo, son los sectores en los que la inversión más se ha reducido, especialmente la pública en los últimos años”, apunta.
Y pronostica: “Para superar la crisis de 2022, que se manifestará con más crudeza en el segundo semestre, necesitaremos invertir los escasos recursos disponibles en potenciar aquellos sectores más dinámicos y estables para superar con sostenibilidad esta recesión. No se trata de invertir en cavar zanjas, sino en los sectores que más contribuyan a este efecto acelerador de la economía a medio y largo plazo”.
Industria aeroespacial y de defensa
En este punto, el autor recuerda que la industria de aeroespacial y de defensa facturó en 2019, 12.000 millones de euros, lo que supone un 11,5% del total de la industria manufacturera española; y exporta bienes por valor de 7.800 millones de euros, lo que supone un 12,5% del total de nuestras exportaciones de bienes.
“Esta industria, unida a la de la alimentación, suponen más del 25% de la actividad industrial de nuestro país, con una demanda muy inelástica, ya que está menos influenciada por los ciclos económicos. De hecho, la industria aeroespacial y defensa apenas sufrió por la crisis de 2009. a diferencia de la automoción que sufrió un descalabro sin precedentes por una elasticidad brutal de la demanda”.
Por esta razón, añade, “ante situaciones de recesión, la promoción de sectores anticíclicos, escasamente ligados al consumo, son fundamentales tanto por su impacto tractor como tecnológico, aprovechando la existencia de un tejido industrial y profesional generado durante décadas”.
