El lanzador de cohetes brasileño Astros registra una venta más en el exterior

(Infodefensa.com) R. Caiafa, Sao Paulo – El general Aderico Mattioli, jefe del Departamento de Productos de Defensa (Deprod), órgano del Ministerio de Defensa, presentó en el auditorio del Instituto de Estudios Avanzados de la Universidad de Sao Paulo el escenario actual de la relación entre el Estado brasileño, la base industrial de Defensa y los Centros de Investigación Académinos nacionales. Mattioli, preguntado sobre el potencial de exportación de los productos de Defensa brasileños, reveló a Infodefensa.com como ejemplo, que el Sistema Astros, lanzador de cohetes de Avibras, acababa de registrar una venta más en el exterior, aunque no pudo afirmar públicamente ni el país cliente ni la versión del sistema escogida.

Mattioli repasó durante su exposición ante los presentes los planes de reequipamiento. En el caso de la Marina, recuperación de capacidad operacional, programa nuclear, construcción del poder naval (PROSUPER y 2ª Escuadra), sistema de dirección de la Amazonia Azul (SISGAAZ), seguridad y navegación e inversión en personal.

En el caso del Ejército: recuperación de capacidad operacional, Defensa cibernética, VBTP-Guaraní, sistemas de monitoreo de fronteras (SISFRON), programa PROTEGER (defensa de instalaciones estratégicas y puntos sensibles), defensa antiaérea (misiles tierra-aire y radares) y el sistemas Astros 2020, nueva versión del lanzador de cohetes fabricado por Avibras Aerospacial.

Con respecto a la Fuerza Aérea: gestión organizacional y operacional del Mando de la Aeronáutica, recuperación de la capacidad operativa, control del espacio aéreo, capacitacíon operacional de la FAB, capacitación científico-tecnológica de Aeronáutica, fortalecimiento de la industria aeroespacial de Defensa brasileña, modernización de los sistemas de formación y post formación de recursos humanos, desarrollo y construcción de ingenios espaciales, apoyo a los militares y civiles del Mando del Aire.

“La Defensa no es un tema militar”

“La Defensa no es un tema militar, está en la agenda de la sociedad”, opina Mattiolio en el Observatorio de Innovación y Competitividad, evento en el que se presentó al público presente el escenario actual de la relación entre el Estado brasileño, la base industrial de Defensa y los Centros de Investigación Académinos nacionales, abordando temas como la Estrategia Nacional de Defensa, las políticas de compra del país, la catalogación de productos de defensa, adquisiciones conjuntas para las tres Fuerzas, dirección y sostenimiento de programas, planeamiento estratégico-financiero a largo plazo, desarrollo de nuevas tecnologías locales con características duales (empleo militar y civil) y la integración y mayor cooperación regional entre los países miembros de UNASUR en las exportaciones e importaciones de material de Defensa en el continente, entre otros.

Según el general Mattioli, “la aprobación de la Estrategia Nacional de Defensa en diciembre de 2008 fue un hito en la historia reciente de la Defensa nacional, con ella se obtuvo una serie de importantes avances resumidos en tres ejes estructurales: la reorganización de las Fuerzas Armadas, la reestructuración de la industria de Defensa y la recomposición de los efectivos militares. Hoy, Brasil busca adquirir nuevas capacidades, y cada fuerza, de acuerdo con su propia evolución histórica, abrazó una vertiente estratégica definida por este documento”.

El jefe del Deprod citó a la Marina, que ha invertido durante décadas en la investigación y desarrollo y en el empleo de la energía nuclear, así como a la Fuerza Aérea, responsable del esfuerzo tecnológico en el sector espacial, en conjunto con diversos órganos gubernamentales y privados. Por su parte, el Ejército ha asumido la responsabilidad de desarrollar un modelo de Defensa cibernética para el país.

Mattioli destaca que la “Defensa no es un sector estanco, por el contrario, la participación de la sociedad, de las empresas, de los diversos segmentos del Gobierno federal, del sector académico, etcétera… lo que propicia la creación de empleos y la fabricación de productos de alto valor agregado, generando desarrollo con sostenibilidad. Tenemos hoy diversas organizaciones dentro y fuera del Estado que trabajan en pro de la industria de la Defensa brasileña”.