La adquisición de blindados para la Policía de Uruguay será impugnada

La adquisición de tres vehículos blindados para la Policía Militarizada de Uruguay será finalmente impugnada ante las anomalías registradas en un proceso de adjudicación, que inicialmente recayó en una empresa para después sufrir una serie de modificaciones técnicas y supuestamente ir a parar a otra compañía. Luego de que la Licitación Pública para la compra de tres blindados para la Guardia Republicana (Policía Militarizada) fuese declarada sin efecto por el Ministerio del Interior y se decidiera realizar la adquisición mediante el cuestionado mecanismo de Compra Directa por Excepción, Infodefensa.com ha accedido a detalles de la licitación original y los procedimientos legales de impugnación que el ganador inicial ha emprendido.

A la licitación pública internacional se presentaron originalmente cinco proveedores, Mathías Ocampo (Arcomet) ofreciendo el Scorpion APC de la firma norteamericana Armormax, Nicolás Ocampo (Optima) con el JAWS Garras de la también norteamericana IAG, Mivato SA con el Stormer II, Técnica del Plata con el Tiger MkII construido por MDT Armor de Norteamérica en versiones de hasta ocho y diez pasajeros, Sapiro Zachow con el Thunder II de la israelí GAIA y la agencia rusa Rosoboronexport con varias opciones como el Tigr, Federal y Goretz M. Durante la primera evaluación se descartó una opción presentada por Mivato (la segunda continuó en competencia) y totalmente las de Rosoboronexport de Rusia, que presentaba varios modelos de blindados, incluyendo un oferta de Tigr como los que ya cuenta la Policía pero en este caso a un precio casi del doble al pagado anteriormente, 385.000 dólares la unidad.

Luego del análisis de las propuestas los dos mejores calificados fueron el Scorpion APC y el Thunder II, siendo elegido el primero básicamente por ser su costo de adquisición más bajo (280.000 dólares la unidad versus 342.000 dólares del Thunder) y haber empatado en los aspectos técnicos y de calidad (48 de 50 puntos ambos).

Así fue adjudicada la resolución por la suma total de 839.400 dólares americanos a la firma representada por Mathías Ocampo. Esta adjudicación, que lleva la recomendación de la Comisión Asesora para esta licitación, fue informada al oferente, firmada y sellada por las partes con fecha 18 de agosto de 2015.

Sin embargo, apenas tres días después, se realiza la cancelación de la Adjudicación bajo el argumento de que luego de reunirse el Comando Ministerial y de analizar las ofertas y consideraciones técnicas se vio que las mismas no satisfacen técnicamente las necesidades de la Policía Nacional. Tras esta cancelación se aprueba el procedimiento de llamado a Compra Directa por Excepción, invitando a todas las compañías que se habían presentado originalmente a reformular sus propuestas.

El 24 de agosto la Gerencia de Área Logística del Ministerio del Interior solicita que se ingrese el llamado a Compra Directa en el sistema de compras online del Gobierno uruguayo, con un presupuesto asignado del entorno de los 18,5 millones de pesos uruguayos, unos 639.000 dólares (bien por debajo de la menor de las ofertas recibidas hasta entonces).

En esas fechas trascendió además que la compra ya se había decidido hacia el ruso VPK-3924 Medved, lo cual ahora el Ministerio del Interior ha desmentido, pero tanto desde fuentes rusas como de la propia Policía Nacional, se da como un hecho su adquisición.

En definitiva un proceso marcado por idas y vueltas que genera desconfianza en el sistema por parte de los proveedores locales y siembra dudas con respecto a la cristalinidad con la que tienen que ser manejados estos aspectos, pues mientras la Comisión Asesora adjudica una Licitación, luego una decisión superior la cancela, generando sorpresa y confusión.