El sistema de defensa aérea dominicano continúa inoperativo

República Dominicana sigue sin poner en operación su Sistema Nacional de Seguridad y Defensa del Espacio Aéreo por falta de presupuesto. No obstante, el Congreso dominicano determinó recientemente que se destinen los fondos necesarios para implementarlo por completo.

Se trata de la instalación de una base de radares militares y un Centro de Mando y Control en la base aérea de San Isidro para detectar vuelos ilícitos que representen posibles amenazas a la seguridad del país o procedentes de criminales del exterior.

Durante el último gobierno del presidente Leonel Fernández, se inició un proyecto para poner en operación el sistema, pero la gestión de Danilo Medina lo mantiene paralizado desde septiembre de 2012, al alegar falta de recursos.

Se contempla que, además de la asignación del Estado para el mantenimiento y mejora de equipos, el sistema debe contar con recursos provenientes de las tasas especializadas asignadas por el poder ejecutivo en un decreto especial. Sin embargo, la Comisión de Seguridad y Defensa del Senado de la República ha emitido una resolución para que el gobierno, a través del Ministerio de Defensa, entregue los fondos que permitan poner en operación la base de radares.

El contrato

El sistema estará integrado, por ley, por la Fuerza Aérea Dominicana (ahora Fuerza Aérea de la República Dominicana -FARD-), el Instituto de Aviación Civil (IDAC), el Cuerpo Especializado en Seguridad Aeroportuaria y de la Aviación Civil (Cesac), la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI), la Dirección de Inteligencia Militar del Ministerio de Defensa y otras instituciones que el gobierno decida integrar por decreto.

En 2009, se contrató a la empresa israelí Elta System LTD, subsidiaria del grupo Israel Aerospace Industries, para el suministro e instalación de dos radares y la construcción de un centro de mandos en San Isidro, para lo cual adelantaron 26 millones de dólares, de un total de 52 millones, más una adenda de cinco millones de dólares. Los equipos fueron importados en julio de 2013, pero no han sido instalados porque no se ha pagado el monto restante.