Defensa rechaza acusaciones de Amnistía Internacional en contra del Ejército de Chile

El Ministerio de Defensa Nacional calificó como "inaceptable" y "carente de fundamentos" la afirmación del informe anual 2019 de Amnistía Internacional (AI) que insiste en acusar al Ejército de Chile de herir deliberadamente a manifestantes para desalentar su presencia en las protestas de octubre de 2019.

Como publicó Infodefensa.com, el Gobierno decretó en aquel mes el Estado de Emergencia y el despliegue de las Fuerzas Armadas para restablecer el orden público en comunas de 15 regiones del país a raíz de disturbios contra el alza tarifaria del tren subterráneo de Santiago que provocaron una ola de violentas protestas y destrucción de propiedad a lo largo del territorio nacional.

En el documento Los derechos humanos en las Américas: retrospectiva 2019, la organización sostiene que "las fuerzas del Estado, principalmente el Ejército y los Carabineros (Policía Nacional), llevaron a cabo ataques generalizados contra manifestantes, lo que dio lugar a la muerte de cuatro manifestantes y a la tortura y lesión grave de otras personas".

El informe de Amnistía Internacional señala además que las manifestaciones "se encontraron con una fuerte represión por parte de las Fuerzas del Estado, que intentaron justificar su uso de violencia contra manifestantes alegando que tales medidas eran necesarias para proteger las infraestructuras y la propiedad privada frente a daños vandalismo".

El texto denuncia también que "durante las protestas, con frecuencia se vio al Ejército emplear armas letales contra manifestantes. De cada cuatro muertes causadas por las fuerzas del Estado al menos tres lo fueron a manos del miembros del Ejército, y una a manos de un carabinero. Una de las muertes fue provocada por armamento de uso militar, y decenas de personas resultaron heridas por munición real."

Posición oficial

El Ministerio de Defensa Nacional publicó un comunicado en el que refutó las imputaciones del informe señalando que "Amnistía Internacional insiste en afirmar que el Ejército hirió deliberadamente a personas con la intención de desalentar las manifestaciones que se iniciaron en octubre pasado en nuestro país”.

En el segundo párrafo del texto el Ministerio agrega que "al plantear eso, Amnistía Internacional nuevamente hace una afirmación absolutamente falsa, que constituye una imputación inaceptable y que carece de fundamentos que la justifiquen”.

Respecto al papel de las Fuerzas Armadas en los nueve días que duró el Estado de Emergencia, el Ministerio sostuvo que actuaron por "mandato del Presidente de la República, con la única finalidad de restablecer el orden público para proteger a los chilenos y la infraestructura crítica, ante la amenaza que representaba la ola de ataques y el vandalismo que afectaron gravemente a nuestro país".

El Ministerio recalcó que "su actuación se ajustó a las normas que regulan el uso de la fuerza, siguiendo los principios de necesidad, proporcionalidad y gradualidad correspondientes, así como el ejercicio del derecho a la legítima defensa y de terceros” y que en las situaciones contrarias a la ley, "son los tribunales civiles los que están investigando con la plena colaboración de las instituciones involucradas y son estos tribunales los llamados a establecer responsabilidades y sanciones”.

El Ministerio de Defensa cerró el comunicado oficial expresando que “las Fuerzas Armadas son un factor de unidad de los chilenos y afirmaciones injuriosas como ésta representan una injusticia que además causa daño a las confianzas necesarias para nuestra convivencia democrática”.

Informe anterior

Amnistía Internacional publicó un informe el 21 noviembre de 2019 en el que acusó a las Fuerzas Armadas de ataques generalizados en contra de la población y uso innecesario y excesivo de la fuerza en el Estado de Emergencia además de una serie de violaciones a los derechos humanos cometidas por agentes del Estado y el empleo indiscriminado de armamento militar y no letal en el control de las manifestaciones.

El Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea de Chile (FACh) emitieron un comunicado conjunto, visado por el Ministerio de Defensa Nacional, en el que manifestaron "que no existió, ni existe ninguna política de las Fuerzas Armadas para dirigir ataques generalizados o sistemáticos contra la población civil" y que el reporte de AI "no contiene ninguna prueba directa o indirecta, de una orden, un acuerdo, o siquiera una insinuación de las Fuerzas Armadas en este sentido”.

Las Fuerzas Armadas recalcaron que durante la vigencia del Estado de Emergencia nunca actuaron "con la intención de lesionar a quienes se manifestaban para desincentivar la protesta social. Al contrario, su intención fue la de proteger a la población, los derechos de nuestros compatriotas y la infraestructura crítica de nuestro país, ante los graves delitos con altos grados de violencia que se estaban cometiendo".

Las instituciones enfatizaron que su política de actuación y las de sus mandos en este período "se ajustó plenamente a las normas que regulan el uso de la fuerza, en tales casos, siguiendo los principios de necesidad, proporcionalidad y gradualidad correspondientes, al mantenimiento del orden público, y las regulaciones que establecen el ejercicio del derecho a la legítima defensa propia y de terceros, particularmente de la población civil, atacada en sus personas y propiedades".

"Los soldados, marinos y aviadores se sienten orgullosos de la confianza depositada por los chilenos a través de la historia, y están comprometidos con su seguridad y bienestar, en cumplimiento de nuestra misión de defenderlos y servir a la Patria de acuerdo a la constitución y a las leyes", concluyó el comunicado oficial conjunto.