La Armada de Chile envío una aeronave de exploración y lucha antisubmarina Lockheed Martin P-3ACH Orion de la Aviación Naval para efectuar una Operación de Fiscalización Pesquera Oceánica (OFPO) a una flota atunera que se encuentra en el área de la Isla de Pascua (Rapa Nui).
El despliegue de la aeronave, perteneciente al Escuadrón de Exploración Aeromarítima VP-1, tiene como propósito garantizar la soberanía y resguardar la Zona Económica Exclusiva (ZEE) del país. contribuyendo y velando por la preservación de los recursos naturales en el área de responsabilidad marítima nacional.
Las OFPO, conducidas por el Comando de Operaciones Navales y ejecutadas a través del empleo de medios de superficie y aéreos, comprende la fiscalización pesquera en aguas adyacentes más allá de la ZEE y permiten vigilar y controlar las actividades de las flotas extranjeras así como también proteger a los parques marinos nacionales.
La tarea realizada por la aeronave de exploración de la Aviación Naval fortalece la tarea de vigilancia permanente y 24/7 que realiza la institución para resguardar los intereses marítimos nacionales y comprobar el efectivo cumplimiento de las medidas de conservación de los recursos pesqueros del país.
El material de vuelo P-3ACH realizó previamente dos OFPO en la zona. A finales de abril, una aeronave efectuó labores de fiscalización aeromarítima en el Área Marina Costera Protegida de Múltiples Usos de Rapa Nui y trasladó 500 kilos de insumos médicos para el Hospital Hanga Roa mientras que en junio otro avión controló el tránsito de una flota atunera internacional.
El P-3ACH Orion es el principal vector de exploración aeromarítima y lucha antisubmarina de la Armada de Chile. Esta aeronave posee una gran autonomía y alcance que le permite desarrollar patrullas por más de 12 horas en la extensa ZEE del país. Además es utilizado en tareas de inteligencia electrónica, designación de blancos transhorizonte y búsqueda y rescate (SAR).
La institución adquirió en Estados Unidos, a comienzos de la década de 1990, una partida de ocho aeronaves Orion para labores de patrullaje marítimo de largo alcance. Dos de las aeronaves pertenecían a la versión antisubmarina P-3A y seis al modelo de transporte UP-3A. La Armada de Chile puso en servicio a la mitad de la flota y el resto se destinó para instrucción técnica del personal de apoyo terrestre y piezas de repuesto.
La Aviación Naval desarrolló en el país un programa de modernización e integró en tres de sus aeronaves el radar de búsqueda Varan de Thales, un detector de anomalías magnéticas (MAD) y el sistema de medidas de soporte electrónico (ESM) ALR-801 Condor, además del equipo de sonoboyas Vigia y el sistema de enlace de datos SP-100 de la empresa chilena Sisdef.
IMP Aerospace comenzó en 2017 la modernización del primero de los dos P-3ACH Orion que quedaban en servicio en la institución. El proyecto, denominado Albatros IV, consideró trabajos de mantenimiento de depósito, reemplazo de componentes de las alas e instalación de nuevos estabilizadores, modernización de aviónica e instalación de nuevos motores que permiten ampliar su vida útil a más de 15.000 horas de vuelo, lo que equivale a 20 años de uso operativo.
El programa MLU (Midlife Upgrade) contempló el montaje de nuevos conjuntos alares de Lockheed Martin e implicó el reemplazo de la parte exterior y de la sección central inferior de las alas además de los estabilizadores horizontales con componentes de diseño mejorado y de mayor resistencia a la corrosión. Los aviones recibieron además una suite de aviónica integrada Fligh2™ de equipos de comunicaciones, navegación y vigilancia de Collins Aerospace.
El primero P-3ACH Orion, matrícula Naval 404, arribó a las instalaciones que posee IMP Aerospace en el aeropuerto de Halifax, Nueva Escocia, a finales del mes de enero de 2017 y retornó a Chile en noviembre de 2019 mientras que la segunda aeronave, Naval 407, inició este proceso en el país norteamericano en mayo de 2018 y regresó al país en abril de 2021.