Oslo invita a La Haya a su alianza de submarinos con Berlín

Si Países Bajos quiere sumarse al programa de submarinos suscrito el año pasado por Noruega y Alemania, Oslo le dará la bienvenida. Así lo ha expresado el Ministerio de Defensa noruego para animar a una posible unión de La Haya al proyecto de adquisición de submarinos de la clase 212CD de la compañía alemana Thyssen Krupp Marine Systems (TKMS) emprendido por los otros dos países europeos citados, aunque las opciones para decidir en el diseño de las futuras naves ya se está cerrando.

Si los neerlandeses entran en el programa germano-noruego, por el que Berlín adquirirá dos submarinos y Noruega cuatro, ganarán opciones para acabar encargándose a su vez del programa alemán de seis fragatas MKS-180, abierto a licitación internacional y del que TKMS quedó el mes pasado excluida.

Peter Valstar, portavoz del Ministerio de Defensa neerlandés, ha explicado que su proyecto de submarinos se encuentra actualmente en fase de investigación, después de haber decidido la necesidad de adquisición. Pero la decisión sobre un producto concreto y un proveedor que lo procure aún está por llegar, informa Defense News. Valstar reconoce por otra parte recientes encuentros entre altos funcionarios de su país y de Alemania para tratar, entre otros, la posible colaboración en distintos tipos de proyectos de defensa, sin especificar más.

Las ministras de Defensa de Nouega y Alemania, Ine Eriksen Søreide y Ursula von der Leyen, formalizaron el pasado verano el arranque de sus planes conjuntos de colaboración en el desarrollo de nuevos submarinos. Ambos países suscribieron a principios de 2017 la creación de una empresa conjunta con este objetivo después de que TKMS fuese elegida por Oslo para formar una sociedad estratégica encaminada al desarrollo de la futura flota de submarinos del país. El diseño de los nuevos buques estará basado en sus U-212A. La empresa conjunta, con sede en Noruega, es la encargada del desarrollo, la producción y el mantenimiento de sistemas de combates.

Los planes de Oslo pasan por la adquisición de cuatro unidades para sustituir a los seis de la clase Ula con los que cuenta ahora, mientras que Berlín prevé adquirir dos unidades.

El calendario contempla la formalización de un contrato común sobre los nuevos submarinos en 2019. De este modo será posible entregarlos entre mediados de la década de 2020 y 2030. Entre tanto, continuarán prestando servicios para Noruega los submarinos Ula, que comenzaron a operar entre 1989 y 1992 y cuentan a priori con una vida útil de treinta años.

Los submarinos del tipo U-212 , en los que se base el desarrollo en marcha, desplazan 1.830 toneladas de inmersión y cuentan con una eslora de 56 metros. En su interior destaca su sistema de propulsión independiente de aire (AIP), que le permite permanecer bajo el agua durante largos periodos de tiempo. Estas naves ya prestan servicio en las armadas de Alemania e Italia.