El Ejército de EEUU equipa con localizadores a sus soldados

El Ejército de Estados Unidos va a desembolsar 34 millones de dólares para la adquisición de dispositivos de localización personal preparados para el seguimiento de los soldados en cualquier entorno. Se trata de la versión militar de un sistema que ya es empleado por cazadores y excursionistas. Estas balizas, similares a las utilizadas por los pilotos, están preparadas para operar, tanto en abierto como encriptado, en entornos donde el desempeño del GPS es limitado (degradado).

Esta capacidad para funcionar en ámbitos degradados e incluso negados para el GPS es la principal diferencia de la nueva herramienta de los soldados respecto a la que los pilotos ya llevan más de una década utilizando.

El suministro de los PRD, como son conocidos los aparatos por las siglas en inglés de Dispositivo de Recuperación de Personal, ha sido encargado por el Pentágono este abril a la compañía McMurdo, filial de Orolia. La firma explica en un comunicado que el dispositivo ordenado para el Ejército de Estados Unidos “será capaz de transmitir tanto señales abiertas como seguras (modo dual entrenamiento-combate) para alertar y notificar que un soldado se encuentra aislado, perdido, detenido o capturado”.

La empresa ya se adjudicó hace dos años un contrato valorado en 3 millones de dólares para suministrar 16.000 balizas a la Guardia Costera estadounidense, informa Army Times.

Los artífices de estos dispositivos aseguran que emplea señales alternas y encriptadas un millar de veces más fuertes que las señales de interferencia, para contrarrestar los esfuerzos del enemigo por entorpecer estas comunicaciones.

Orolia emplea datos de "posicionamiento, navegación y temporización elásticos" para "todo, desde navegación y posicionamiento de vehículos terrestres y fuerzas de tierra a pie hasta la orientación de armas" y la sincronización de otros activos tecnológicos.