El Independencia y el Espora se vieron obligados detener el fuego.Casi 13 horas después, en la madrugada del 30 de septiembre, los sublevados, sin escapatoria, decidieron abandonar el buque, que pasó de nuevo a manos del Gobierno.
La batalla se produjo en el marco de la Revolución Mexicana.El Ejército Revolucionario Mexicano, ubicado en el norte de la República, comandado por Venustiano Carranza, trataba de avanzar hacia la capital del país y, para ello, debían abrirse paso por las varias ciudades que se encontraban controladas por el gobierno del general Victoriano Huerta.