La flota de 12 aviones de combate de quinta generación F-35B encargada por Singapur, prestará servicio acompañada de otros ocho aparatos más, en esta ocasión de la variante F-35A. Esta última configuración se caracteriza por ser la diseñada para el despegue y el aterrizaje en pistas convencionales, mientras que los F-35B están preparados para despegar en pistas cortas (e incluso verticalmente) y aterrizar de forma vertical (STVOL), por lo que se trata del modelo en el que está interesada la Armada española para equipar su buque insignia, el Juan Carlos I. El ministro de Defensa singapurense, Ng Eng Hen, ha confirmado la adquisición de los nuevos ocho F-35A durante el debate sobre los presupuestos en el parlamento del país.
También ha sido diseñada una versión cisterna para la lucha contra el fuego y en noviembre de 2019, por ejemplo, se presentó en Alemania una nueva configuración del C295, que incluye mejoras en cabina, diseño exterior y capacidades de inteligencia, vigilancia y reconocimiento, ISR.
El sistema se diseñará con plataformas de movimiento y vibración para facilitar “la capacitación en los procedimientos normales y de emergencia del helicóptero, poniendo especial énfasis en el entrenamiento en todas las posibles misiones a ejecutar por la RSAF, como pueden ser la búsqueda y rescate, evacuación aeromédica y operaciones de asistencia humanitaria y socorro en caso de catástrofes, entre otras”.
La industria, por su parte, también estuvo representada por la empresa SAES. La comitiva estuvo formada por el vicealmirante Manuel Martínez Ruiz, director de Ingeniería y Construcciones Navales de la Armada; el contralmirante José Antonio Toro Fernández, subdirector de Ingeniería; y el capitán de navío Montenegro del Órgano Auxiliar de Dirección de la Dirección de Ingeniería y Construcciones Navales.
Curiosamente, el número de 12 cazas F-35B, que es la variante de despegue corto y aterrizaje vertical (STVOL) del aparato, es la que se ha señalado desde la Armada española como la necesaria para sustituir a sus actuales aeronaves AV-8B en los próximos años.
En concreto, apunta la compañía, “se ha comprobado tanto en el sistema MicroLite como en el sistema SDR basado en tierra de BNET”.