Filipinas ya dispone del lote de tres aviones C295 que encargó a Airbus

La Fuerza Aérea de Filipinas ha recibido la tercera unidad del avión medio de transporte táctico C295 que encargó a Airbus Defence and Space. El aparato ha llegado desde la planta de ensamblaje final de Sevilla a la Base Aérea Clark, que se encuentra en la isla de Luzón, donde estuvo operada hasta 1991 por Estados Unidos. Las entregas se iniciaron el pasado marzo (imagen superior) con la recepción del primero de los tres aparatos a la Base Aérea de Bennito Ebuen, en la pequeña isla de Mactán, frente a las costas de la isla de Cebú.

Filipinas selección a principios de 2014 la oferta de Airbus Defence and Space como único postor considerado para dotarse de estos tres nuevos aviones de transporte medio. Con ellos, el país quiere completar su flota de tres C-130. Como recogió Infodefensa.com entonces, el Comité de Ofertas y Adjudicaciones del Departamento de Defensa Nacional del país (DND-BAC, por sus siglas en inglés) señaló que la empresa europea superó todos los requisitos técnicos y financieros que había establecido.

Anteriormente la empresa ya participó en una licitación previa, que tuvo lugar en noviembre de 2013, pero fue descalificada por fallos en los requisitos de documentación. Aquel proceso acabó anulado tras la descalificación posterior de otro de los competidores.

Según la información publicada entonces por el portal local ABS-CBN News, la división de Airbus Group ofreció a Filipinas tres aeronaves C295, con sistema logístico integrado, por 5.288 millones de pesos (cerca de 100 millones de euros al cambio actual). La compra se enmarca en el anuncio realizado por el presidente del país, Benigno Aquino, en el verano de 2013 de que país iba a adquirir aviones, radares y otros equipos relacionados durante los siguientes tres años para reforzar su limitada capacidad aérea.

Entre los recursos que se planteó la compra, según citó, de “cazas, aviones patrulleros de largo alcance y aeronaves de apoyo aéreo cercano”, además de aviones de transporte, helicópteros polivalentes y de ataque, radares de defensa aérea y simuladores de vuelo, sobre los que el país también mostró su interés.

Las tensiones territoriales con China empujaron a Filipinas a iniciar la modernización de sus recursos de defensa. Con este objetivo el Parlamento autorizó entonces al Ministerio de Defensa un gasto de 75.000 millones de pesos (más de 1.400 millones de euros) durante el siguiente lustro. Ese desembolso se suma a los 19.000 millones (casi 360 millones de euros) ya empleados con el mismo fin durante los tres ejercicios precedentes.

Aquino recordó entonces que en el periodo de ocho años que fue de 1992 a 2010 el país apenas gastó 33.000 millones de pesos (unos 620 millones de euros) en la modernización de sus fuerzas armadas, un 65 por ciento menos que lo comprometido para los ocho años siguientes

El C295, como los que ya operan en Filipinas, es un avión de usos múltiples que se emplea en misiones humanitarias, en operaciones de despliegue de fuerzas de intervención rápida, en vigilancia marítima, y en distintas tareas de seguridad del territorio. Está preparado para transportar a 71 paracaidistas o, entre otras opciones, cinco pallets grandes o diez pequeños. Su velocidad máxima de crucero es de 260 nudos (480 kilómetros por hora) y su peso máximo al despegue es de 23,2 toneladas.

Foto: Airbus Defence and Space