El OPV Fuentealba de la Armada de Chile efectúa el relevo y el reaprovisionamiento del faro Diego Ramírez

El patrullero oceánico OPV-83 Marinero Fuentealba de la Tercera Zona Naval de la Armada de Chile realizó el relevo de dos integrantes de la dotación y el reaprovisionamiento del faro Isla Diego Ramírez, el más austral del mundo.

Esta instalación, ubicado en el Paso Drake, a unos 105 km al suroeste del Cabo de Hornos, es fundamental en el control del tráfico marítimo desde y hacia el Territorio Chileno Antártico.

Según la institución, la unidad transportó a especialistas en faros para relevar a parte de la dotación que por más de cuatro meses cumplió tareas en uno de los faros más aislados de la jurisdicción y que es conocido por su extrema ubicación geográfica.

Los fareros cumplieron un proceso de selección y preparación previa para desempeñar tareas en total aislamiento que incluyó instrucción de observaciones y registros meteorológicos por parte del Centro Meteorológico Marítimo de Magallanes.

Los especialistas fueron capacitados también en primeros auxilios por el Hospital de las Fuerzas Armadas Cirujano 1º Cornelio Guzmán y en tareas de control de tráfico marítimo mantenimiento y reparación por parte de especialistas en faro del Centro Zonal de Señalización Marítima de Punta Arenas.

Reabastecimiento aéreo

La Tercera Zona Naval dispuso de un destacamento embarcado con un helicóptero Airbus AS365 Dauphin del Grupo Aeronaval Sur para realizar el complejo proceso de reabastecimiento mediante la maniobra de carga colgante y que se desarrolló con condiciones meteorológicas adversas.

El helicóptero asignado al OPV-83 Marinero Fuentelba efectuó 52 vuelos con carga por más de siete horas trasladando 12.268 kilos. Cada una de las fases de la maniobra contó con una permanente coordinación radial y visual entre los pilotos y el personal del buque y en tierra.

Adicionalmente, especialistas en meteorología del Centro Meteorológico Marítimo de Magallanes y Antártica chilena, realizaron la instalación de una estación automática para el registro de condiciones de viento, temperatura y humedad, fundamentales para la planificación de navegaciones y vuelos en el área.

En relación a la maniobra efectuada, el comandante del buque, capitán de fragata Luis Eduardo Bustos, señaló que “para la dotación del OPV-83 Marinero Fuentealba esto representó un desafío, como cada vez que la unidad navega por las complejas aguas australes”.

Bustos afirmó que este tipo de operaciones en apoyo a reparticiones aisladas "son fundamentales para salvaguardar la vida humana en el mar, control de tráfico marítimo y soberanía efectiva, disponiendo de medios multidimensionales para el cumplimiento de la tarea en uno de los lugares más maravillosos a la vez que inhóspitos del continente americano”.