A pesar de que el 21 de julio era la fecha elegida para la ceremonia de puesta a flote del submarino S-82 Narciso Monturiol, Navantia ha comunicado que, finalmente, "por motivos de agenda, la ceremonia se aplaza hasta después del verano".
De acuerdo con la propia compañía, esta ceremonia es un evento cuyo propósito es el amadrinamiento del submarino y es independiente de la maniobra de puesta a flote. Por lo tanto, el aplazamiento de este acto institucional "no afecta al calendario de hitos del submarino ni a la maniobra, que tendrá lugar, como estaba previsto, después del verano".
En principio, la madrina del buque seguirá siendo, en la nueva fecha que se determine para la ceremonia, Isabel López Fernández, la esposa del Jefe del Estado Mayor de la Defensa (Jemad), Teodoro Esteban López Calderón.
Huelga del sector del metal en Cartagena
Este aplazamiento coincide con la huelga del sector del metal que arrancó el pasado 18 de junio en Cartagena y que afecta especialmente a Navantia en esta ciudad. De hecho, una decena de trabajadores iniciaron la pasada semana una huelga de hambre para forzar mejoras salariales.
Tras esta ceremonia, muy tradicional en el ámbito naval, tendrán lugar las pruebas de puerto que permitirán comprobar todos los sistemas del buque, con diversos hitos de seguridad, como el embarque de gasoil, la carga de batería o la prueba de propulsión sobre amarras. Después comenzarán las pruebas de mar y un año después será entregado a la Armada española.
El buque superó en marzo uno de los principales hitos de seguridad en la Nave de Armamento de Submarinos del astillero de Navantia en Cartagena, donde tiene lugar la construcción de los buques. Navantia completó entonces con éxito la puesta en tensión de los equipos. Tras la puesta a flote, el calendario acordado a finales de 2024 por el Ministerio de Defensa y Navantia contempla la entrada en servicio de la segunda unidad de la serie en otoño de 2026.