La Jefatura de Apoyo Logístico de la Armada ha hecho público el anuncio de licitación de un acuerdo marco para la adquisición de morteros de 60 mm por un valor estimado de 1.283.293 euros con un plazo de ejecución de tres años a partir del momento de su formalización. El contrato, que podrá ser prorrogado, deberá incluir también formación con fuego real y simulación, así como los repuestos correspondientes.
Estos morteros se destinarán tanto a la Fuerza de Infantería de Marina como a los propios buques de la Armada, por encontrarse los existentes en su último tercio de vida, con la finalidad de mantener la operatividad de éstas unidades.
En total, está prevista la compra de 27 morteros a razón de nueve por cada año de los tres que tendrá el acuerdo marco.
Este tipo de morteros de 60 mm son utilizados fundamentalmente por los batallones de desembarco de la Infantería de Marina, encargados del desarrollo de la maniobra. Estos batallones pueden actuar con o sin refuerzos encuadrados en una unidad superior, de forma independiente, o constituir el núcleo generador de organizaciones operativas de diferente entidad y, en particular, del Batallón Reforzado de Desembarco (BRD) en operaciones anfibias.
Son capaces de combatir en todo tiempo y terreno y por sus características son la unidad táctica fundamental de la Infantería de Marina, capaces de cumplir una gran variedad de misiones de combate.
Fabricantes
Actualmente, la Armada está inmersa en un plan de adquisición de morteros embarcados Eimos de 81 mm que fabrica la empresa alemana Rheinmetall, fabricante también del modelo RSG60, de 60 mm de calibre, desarrollado especialmente para infantería y fuerzas especiales.
Su peso ronda los 16 kilos y el alcance varía según el tipo de munición empleada, pudiendo alcanzar hasta 3.200 metros. Si el arma se equipa con un tubo de 100 centímetros, 30 centímetros más largo que la variante estándar, el alcance se incrementa en aproximadamente 500 metros. La variante de comando (fuerzas especiales) tiene un alcance aproximado de 2000 metros.
Es posible separar el arma de su plato base en unos 30 segundos al retirar los seguros de retención, convirtiendo al arma en equipo para fuerzas especiales, aún más ligero que la variante estándar para infantería.
La empresa austriaca Hirtenbenger Defence Systems también fabrica morteros de 60 mm. equipados con la mira R08 para apuntar indirectamente en azimut y elevación. Para un ajuste rápido y sencillo de la elevación del mortero, la mira R08 incorpora una placa metálica intercambiable que almacena los diferentes datos balísticos de la munición.