Astilleros mexicanos construirán el 66 de la nueva Damen Sigma 10514 de la Armada

En astilleros mexicanos se construirán cuatro de los seis módulos del patrullero oceánico tipo Sigma 10514, que la Armada de México encargó a Damen Shipyard y cuyos trabajos de construcción se iniciaron en Holanda.

Como estaba previsto y adelantó Infodefensa, la ceremonia de puesta de quilla del nuevo Long Range Patrol Vessel o Patrullera Oceánica de Largo Alcance (Pola), como la denomina la Armada mexicana, se llevó a cabo el pasado 17 de agosto en el astillero de Damen en Vlissingen, Holanda. El acto contó con la asistencia del secretario de Marina de México, almirante Vidal Francisco Soberón Sanz; del jefe del Estado Mayor de la Defensa del Reino de los Paises Bajos, general Tom Middendorp, del director ejecutivo del Grupo Damen, Rene Berkvens; y del director general de Construcción de Damen, Hein Van Ameijen.

De los seis módulos que componen la Pola Sigma 10514, cuatro serán construidos en México, en los astilleros de la Secretaría de Marina y una vez que los seis módulos estén terminados, el ensamblaje final se llevará a cabo en México; lo que genera un impacto económico positivo para las comunidades que se encuentran en las cercanías de dichos astilleros, aparte del desarrollo industrial y educativo que acompaña a estos proyectos. A este respecto y en el marco de la sociedad entre Damen y la Semar se anunció que Damen apoyará en la transferencia de tecnología a México específicamente en los temas de tecnologías de sistemas de detección, propulsión y la integración de éstos a la industria naval mexicana.

El almirante Soberón mencionó en su discurso que la construcción de la Pola responde a las necesidades de fortalecer y modernizar el poder naval de México desde los puntos de vista operacionales, industriales y tecnológicos. Algo que es cierto, ya que antes de que la Armada arrancara su programa de construcción de buques, en ésta categoría, se operaban predominantemente navíos de segunda mano e incluso provenientes de los excedentes norteamericanos de la Segunda Guerra Mundial, que como es obvio, siempre dejaron mucho que desear en economía y tecnología, práctica que para bien se ha terminado.

Además, comentó sobre el convenio entre Damen y la Semar, en el que se consolida con la transferencia de tecnología, lo que permitirá elevar el nivel tecnológico de los astilleros mexicanos y sus procesos de construcción, lo que podría interpretarse en el sentido de que las bases para construir más de estos buques en México están garantizadas,aparte de que a palabras del Almirante, el personal de los astilleros navales mexicanos ya tienen las capacidades técnicas necesarias al rebasar los cinco años de trabajar en conjunto.

No la primera vez que la Semar trabaja con el grupo holandés, México ya ensambla bajo licencia y opera con amplio éxito diez patrulleros costeros tipo Damen Stan Patrol 4207/clase Tenochtitlán y recientemente construyó en Guaymas, Sonora, y puso en operación el buque logístico Isla María Madre BAL-11, del tipo Damen Fast Crew Suplier FCS5009.

Detalles de la Pola

Aunque su perfil operativo final está lejos de ser definido, al menos públicamente, trascendió que el buque servirá para dar una mayor cobertura dentro y fuera de las zonas económicas exclusivas, realizando y coordinando misiones SAR de largo alcance, ayuda humanitaria dentro y fuera de México, labor que ya realiza la Armada y por supuesto la participación de México en ejercicios internacionales a los que ya acude de manera continua como Rimpac o Unitas. Sin duda la Pola incrementará el grado de participación de los marinos mexicanos al contar con sistemas de última generación y un buque de mayores capacidades.

La Armada ha dado a conocer una serie de datos sobre su construcción, que como ya fue mencionado, cuatro de los seis módulos se construirán en México lo que representa el 66 % del total del buque, esto será con mano de obra 100 % mexicana y se espera que de junio a septiembre de 2018, se concluya con el armado e integración de los módulos. Siendo la fecha tentativa para su botadura, octubre de 2018, a la vez que su abanderamiento se plantea en noviembre del mismo año. Su alistamiento, pruebas de mar y puesta en operación se proyecta que terminen para diciembre de 2019.

Con respecto de los sistemas de abordo, aún no se proporcionan los detalles que aclaren qué empresa se hará responsable por ellos, así como la posibilidad de implementar sistemas mexicanos en la misma. Sin embargo la Armada destacó que la POLA tendrá el 100% de las capacidades operacionales básicas necesarias para su labor dentro de las tareas que realiza la flota de la Armada de México. La interpretación que se puede obtener éste párrafo podría significar que los sistemas de armas a incorporar, podrían situarse más en lo esencial, como un cañón Bofors en la proa y la presencia de algún sistema de cobertura antiaérea, más otras armas secundarias; aunque es pertinente esperar mayor definición en este tema, con respecto de capacidades ASW o la incorporación de misiles de otros tipos. De acuerdo a la Semar, la Pola incrementará las capacidades de cobertura que la Armada tiene en el océano Pacífico y se espera que su incorporación incremente en un 21 % dicha protección, al poseer una autonomía de 20 días en la mar, lo que es un 55 % más de lo que las antiguas fragatas de la clase Allende podían ofrecer y que ahora serán sustituidas por la integración de la Pola tipo Sigma 10514. Las características generales son las siguientes: Eslora: 107,14 metros. Manga: 14,02 metros. Desplazamiento: 2.570 Toneladas. Velocidad: 27 nudos (50 Km/h). Propulsión: diésel mecánica y diésel eléctrica. Autonomía: 20 días.