Juanjo Forteza (Thales) y Luis Manuel Cuesta (GMV) explican la última tecnología que se emplea en España en la vigilancia de fronteras y que permite la reacción en tiempos operacionales óptimos
España emplea tecnología de vanguardia en la vigilancia de fronteras. Es el caso del sistema de la Comandancia de Melilla diseñado por Thales (junto con Trablisa) y entregado a la Guardia Civil o la tecnologías de GMV que, entre otras capacidades, permiten integrar desarrollos de uso crucial para Frontex, la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas. Ambas empresas explican las claves tecnológicas necesarias en el control de fronteras con Juan Forteza y Luis Manuel Cuesta.
El Sistema Integral de Vigilancia de la Comandancia de Melilla de la Guardia Civil está formado por un conjunto de sensores que pueden interactuar con otros sensores de fuente abierta, y comunica la información a un centro de control si se detectan o visualizan anomalías en la fronteras. El proceso sucede de manera inmediata y "ayuda al operador a tomar decisiones para verificar o reconducir la situación", explica Juanjo Forteza, director de ofertas y proyectos de Thales. "La información que regogen los sensonres se digitaliza, se traslada a algoritmos de software en tiempo operativo y esto permite tomar decisiones adecuadas", añade Forteza.
GMV desarrolla sistemas tecnológicos de vanguardia en diferentes dominios. Luis Manuel Cuesta, director de programas de seguridad para Defensa y Seguridad de GMV, explica el valor añadido de la empresa integrar ese desarrollo de vanguardia "ponerlo a disposicion de temas transversales como el control de fronteras". GMV trabaja de este modo con el sistema Eurosur de Frontex.