España contratará otra empresa para servicios de limpieza de instalaciones militares

El ministro de Defensa, Pedro Morenés, ha indicado que su departamento firmará un nuevo acuerdo para la prestación de los servicios de limpieza de instalaciones militares tras rescindir el contrato con Cleanet por el impago de nóminas a sus trabajadores.

El anuncio ha sido en respuesta a la pregunta de la socialista Silvia Oñate, en la sesión de control del Congreso, sobre las soluciones que va a ofrecer el Ministerio de Defensa a los trabajadores de la empresa Cleanet que desarrollan su actividad en instalaciones militares y que se han visto afectados por el impago de sus nóminas por parte de la empresa.

El titular de Defensa ha aclarado que su departamento no tiene vinculación jurídica, pero sí “preocupación” por el problema laboral, y que por ello ha hecho un seguimiento continuo a la situación del conflicto. Recordó que ya el pasado 8 de octubre se entrevistó en Cartagena con los trabajadores afectados y que se le ha requerido a la empresa que cumpliera con sus obligaciones. Al no llegarse a una solución, el Ministerio decidió, el 14 de enero, iniciar un procedimiento de resolución de la relación contractual con la empresa Cleanet.

El impago de las nóminas de trabajadores de la empresa llevó a estos a emprender una huelga que dura más de seis meses. Precisamente, más de un centenar de ellos se han manifestado en las cercanías del Congreso, mientras ocho asistían a la sesión plenaria del Congreso desde las tribunas de invitados.

El ministro precisó que el Consejo de Ministros dio luz verde el pasado 24 de enero a la autorización para un nuevo contrato, que tendrá una vigencia desde el 19 de marzo, fecha en la que finaliza el actual, hasta el 31 de diciembre.

Asimismo añadió que la nueva empresa adjudicataria se subrogará y asumirá las obligaciones del pliego de cláusulas, incluidas las referentes a las disposiciones en materia laboral.

Por su parte, la diputada socialista reprochó al ministro que la solución llega tarde porque los trabajadores llevan seis meses sin cobrar.