Para estar al día de las últimas novedades del sector Defensa y Seguridad, Infodefensa.com presenta el informativo semanal que resume las noticias más relevantes del sector en la edición América.En entrevista exclusiva con Infodefensa, el comandante en jefe de la Fuerza Aérea Uruguaya, general Fernando Colina, indicó que la compra de los Super Tucano permitirá que los pilotos realicen el salto tecnológico que tanto se necesita.
El sistema tiene una gran capacidad para cubir las diferentes misiones con distintos sensores, incluida la patrulla de fronteras, que significa un salto muy importante en lo que se refiere a capacidades tecnológicas. Las capacidades que nos brindan los VANT son fundamentales para la Fuerza Aérea y el país en general, no solo a nivel de ISR o patrulla, sino también en todo lo que se refiere a combate de incendios forestales, contaminación y otras tareas. ¿Qué puede contar sobre el desarrollo de capacidades en el sector espacial?Hemos tenido mucha receptividad tanto a nivel gubernamental como de las empresas privadas.
Con la llegada de los Super Tucano ya no tiene sentido mantener su operación cuando casi no hay operarios en el mundo.¿Sigue en pie la compra/canje de los tres helicópteros Bell 206 por las células de Lockheed Martin C130B? Continuamos en el proceso, esperando que se apruebe a nivel legal en la órbita del Ministerio de Defensa.
En aeronaves nuevas hemos analizado varias opciones, como el FA-50, el M-346, el L-15 y el L-39NG. La compra de los Super Tucanos es efectiva para la tarea que se les encomendará en Uruguay, pero deben ser parte de un sistema y eso es lo que hemos estado persiguiendo desde hace mucho tiempo. ¿A qué tipo de sistema se refiere?El Super Tucano es una aeronave muy avanzada tecnológicamente y nosotros nos estamos aggiornando para poder utilizar al 100 % su tecnología.
El Gobierno de Uruguay, a través del Ministerio de Defensa, ha concretado la adquisición de un importante paquete tecnológico para la Fuerza Aérea Uruguaya (FAU) a la firma española Indra, empresa que ya tenía una importante presencia en el país.En diálogo con Infodefensa.com, el ministro de Defensa de Uruguay, Armando Castaingdebat, confirmó que la compra se sumará a los sistemas ya instalados, incluyendo dos radares Lanza 3D, el radar secundario MSSR Modo S del principal aeropuerto del país en las afueras de Montevideo, el radar secundario ADSB del aeropuerto de Santa Bernardina en el centro del país y los sistemas del centro de operaciones aéreas de la FAU.En referencia a el nuevo contrato, Castaingdebat destacó que incluye la compra definitiva del radar secundario MSSR, que hasta ahora estaba en lease, el mantenimiento de esa unidad, los dos Lanza y el de ADSB de Santa Bernardina hasta el 2030, como asi también el software necesario -data link- para la interconexión de los radares con las nuevas aeronaves Embraer 314 Super Tucano. El acuerdo incluye la instalación de Indra en el país, en la zona del aeropuerto de Carrasco en las afueras de Montevideo, desde donde se hará todo el mantenimiento de sus sistemas para América Latina y la producción de soporte tecnológico, no solamente para sistemas de radares, sino también para otras divisiones de la firma, como por ejemplo la parte de energía eólica.
Idealmente, su complemento debería haber sido la docena de Embraer 312 Tucano que la FAU pensaba comprar a principios de la década de los '90, compra que eventualmente fue decidida para la suiza Pilatus, que entregó seis unidades del modelo PC-7 Turbo Trainer.La compra de los Super Tucano, que de alguna manera causó sopresa por su rápida decisión, se enmarca en una negociación de alto contenido político, más allá de las consecuencias positivas, al menos en primera instancia, que generarán para la FAU, fuerza que actualmente carece de aeronaves de combate. El movimiento estratégico realizado por el gobierno actual de centroderecha, que decidió comprar a un país vecino de gobierno socialista, inhabilita la posibilidad de que el contrato caiga en caso de que en las próximas elecciones la izquierda vuelva al poder. Sería muy arriesgado para un nuevo gobierno uruguayo, alineado ideológicamente con el de Brasil, retroceder y cancelar una compra de 100 millones de dólares para Embraer.
un total de 52.278,64 dólares para la provisión de repuestos aeronáuticos, fungibles y rotables para la flota de aeronaves Embraer C-120 Brasilia, Beechcraft UB-55/UB-58 Baron, Cessna U-206 Stationair y A-37B Dragonfly.La segunda compra, con el número 11/2024, correspondió a la firma IES Group Inc, por un total de 52.972,26 dólares.
Sin las misiones de paz, las Fuerzas Armadas de Uruguay carecen de fondos de inversión para su equipamiento.Por otra parte, el retorno de los helicópteros a Uruguay proporcionará un alivio a las decaídas alas rotativas uruguayas, que actualmente se encuentran en sus mínimos históricos.
El resto de la flota de transporte de la FAU, compuesta por aeronaves CASA C-212 Aviocar de distintos modelos, esta diezmada por falta de repuestos y fondos para ser mantenidas.Escasez de recursos y material La falta de planeamiento y asignación de recursos desde el poder político para poder cumplir con la regla básica de tener al menos tres unidades de cada modelo de aeronave en inventario que permita la disponibilidad de una aeronave en todo momento, raramente se cumple en Uruguay; las compras son aisladas o se espera la donación de algún país para poder tener el material necesario para cumplir el mandato constitucional que pesa sobre las Fuerzas Armadas.
Una delegación de la Fuerza Aérea Uruguaya (FAU) encabezada por su comandante en jefe, general del aire (Av.) Luis de León y la teniente coronel (Av.) Lucia Varela, visitó recientemente la firma checa Aero Vodochody para realizar vuelos de prueba y evaluación en el avión Aero L-39NG que, junto al L-159 ALCA de la misma fábrica, son dos de los potenciales candidatos a reemplazar a las aeronaves Cessna A-37B Dragonfly actualmente en servicio en la FAU. Si bien el ALCA es, de los dos modelos, el que posee las características más cercanas a lo que precisa la FAU, los costos de adquisición de estas aeronaves puede que se tornen prohibitivos para el bajo presupuesto de defensa uruguayo y se terminen analizando opciones mas modestas y con menores capacidades que las deseadas originalmente. Aeronave Aero L-39NGEn este sentido, la carencia de radar, menor capacidad de carga de armamento, suite electrónica más básica y prestaciones más limitadas del L-39NG comparado con el ALCA también disminuyen sensiblemente los costos de adquisición de las aeronaves. El L-39NG es una evolución del ubicuo entrenador L-39 checo y actualmente se encuentra en dos fases de producción, la fase uno comprende la reconstrucción de células originales con nuevos motores turbofán Williams International FJ44-44M y la adición de una nueva suite electrónica, pero manteniendo los pilones subalares ‘secos’ con tanques adicionales de combustible en las puntas de las alas. La fase dos, corresponde a células de construcción totalmente nuevas, con una novedosa suite electrónica de Genesys Aerosystems, la adición de dos puntos subalares adicionales para un total de cinco incluyendo pilones húmedos para tanques de combustible y removiendo los tanques de las puntas de las alas. La velocidad máxima es de 770 km/h, velocidad de trepada de 23 m/s, con un techo de servicio de 11.500 metros y un alcance de 2.500 kilómetros sin tanques adicionales.