Un informe firmado el año pasado por dos miembros de la Comisión de Asuntos Exteriores, Defensa y Fuerzas Armadas del Senado francés ya advirtió, en esta misma línea, de los perjuicios “para la construcción de una base europea industrial y tecnológica de defensa” que entrañaría no sumar esfuerzos en los programas FCAS-Tempest.