La tripulación de la fragata noruega NKM Helge Ingstad (F313) no cumplió bien su misión la noche de principios de noviembre en la que el buque, de 5.300 toneladas y 134 metros de eslora, no fue capaz de variar su rumbo cuando se cruzó con el del petrolero con bandera maltesa Sola TS. La consecuencia fue el hundimiento de la nave de guerra, al que la colisión ocasionó una brecha de medio centenar de metros de longitud.