El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, reunió a directivos de las principales compañías del sector de la ciberseguridad, ligado también a la ciberdefensa, en el tercer encuentro en menos de una semana con la industria que tendrá un papel relevante en el nuevo plan anunciado por el Gobierno para encauzar las nuevas inversiones en en defensa. En el encuentro, al máximo nivel como los dos anteriores, participaron representantes de ocho empresas.
Al frente de la nueva división estará Diego Presa, ingeniero con experiencia en el sector tecnológico que conoce bien el mercado catalán tras su paso por Vodafone en Cataluña y Aragón los cuatro últimos años. El objetivo es replicar el modelo que ya ha funcionado, destaca la compañía, en el País Vasco con TRC Bat.
En el proyecto también participa TRC como subcontratista. Este contrato es el primero en el que Indra y Escribano trabajarán juntas en una UTE conocida como C-UAS, con TRC como socio. Las tres empresas españolas anunciaron en junio de este año la creación de esta alianza industrial para desarrollar sistemas antidrón (C-UAS) adaptados a las necesidades y requisitos de las Fuerzas Armadas en zona de operaciones.Estas compañías ya cuenta con una amplia experiencia en las tecnologías asociadas a estos sistemas para neutralizar drones y disponen de soluciones probadas en operaciones, como el sistema Crow de Indra para dar cobertura a bases militares y eventos singulares, en servicio en el Ejército del Aire y del Espacio o el citado proyecto Cervus del Ejército de Tierra, donde Escribano colabora con TRC. Por su parte, Indra y Escribano también colaboran en la actualidad en soluciones antidrón navales para la Armada.
El Ejército de Tierra ha desplegado su sistema antidrón Cervus en la misión de la OTAN en Eslovaquia, que lidera en la actualidad la Brigada Paracaidista (Bripac). Esta solución, diseñada por la industria de defensa española, está operativa en el Mando de Artillería Antiaérea (MAAA), tras dar sus primeros pasos en el Regimiento de Guerra Electrónica (REW) 31. Desde mediados de 2023, el Ejército de Tierra dispone de Cervus III, la versión más avanzada del sistema antidrón. Cervus está pensado para proteger el espacio aéreo y garantizar la seguridad en emplazamientos civiles y militares críticos ante posibles ataques con drones.
Para estar al día de las últimas novedades del sector Defensa y Seguridad ya pueden visualizar el informativo semanal de InfodefensaTV que resume las noticias más relevantes del sector.La compañía GDELS-Santa Bárbara Sistemas ha anunciado la reactivación de la línea de fabricación de cañones-tubos de gran calibre (105, 120 y 155 mm) para artillería y carros de combate en su planta de Trubia, Asturias.Australia ya ha enviado a las cuatro propuestas extranjeras que designó como candidatas para construir sus futuras once fragatas del programa Sea 3000 las correspondientes solicitudes de información, entre las que se encuentra el astillero español Navantia.Escribano, Indra y TRC han firmado un acuerdo de colaboración para desarrollar sistemas antidrón (C-UAS) adaptados a las necesidades y requisitos de las Fuerzas Armadas.El Ejército de Tierra ha adjudicado a Instalaza un importante contrato para aumentar la potencia de fuego de su infantería.
Las tres compañías ya cuenta con una amplia experiencia en las tecnologías asociadas a estos sistemas para neutralizar drones y disponen de soluciones probadas en operaciones, como el sistema Crow de Indra para dar cobertura a bases militares y eventos singulares, en servicio en el Ejército del Aire y del Espacio o el proyecto Cervus del Ejército de Tierra, donde Escribano colabora con TRC. Por su parte, Indra y Escribano también colaboran en la actualidad en soluciones antidrón navales. Las empresas destacan que "la unión e integración de sus capacidades aportará una mayor protección y seguridad a las Fuerzas Armadas frente a las nuevas amenazas en el campo de batalla mediante una solución integral C-UAS, que será adaptada para su fácil despliegue e integración en plataformas terrestres, navales, o para la protección de infraestructuras críticas".
La primera ya ha sido probada en misiones en Mali, la segunda está desplegada en la actualidad en Letonia, y la tercera, la más avanzada.
El Centro de Experimentación de El Arenosillo (Cedea) en Huelva ha acogido una serie de pruebas de la torre Guardian 2.0 en la configuración para abatir drones.
En segundo lugar, la nueva plataforma incorpora dispositivos de captación de radiofrecuencia diseñados y desarrollados por TRC para ampliar el espectro radioeléctrico analizado, y el sistema Oteos, un dispositivo electroóptico de altas prestaciones desarrollado por la empresa Escribano. De esta manera, mediante el uso de los algoritmos de visión artificial de TRC, integrados con el sensor de Escribano, es posible identificar de forma autónoma la presencia de drones y geo posicionarlos en base a los modelos y algoritmos de inteligencia artificial incluidos en la nueva plataforma y entrenados junto con el REW 31.
El Oteos también ha sido seleccionado por el Servicio de Armamento de Guardia Civil para la vigilancia de fronteras de Ceuta y Melilla y por el Servicio Marítimo para su instalación en embarcaciones de mediana y gran altura que luchan contra la inmigración ilegal y el tráfico de mercancías ilegales a lo largo de la costa mediterránea y en los archipiélagos de Baleares y Canarias para vigilar las aguas españolas y su entorno.
El cerebro del sistema es un software de mando y control que controla todos los sensores, reporta el estado de cada uno, marca en un mapa las amenazas y actúa sobre la inhibición.