Esta semana ha llegado a la Nave de Armamento de Submarinos (NAS) la estructura de la vela del S-82, que será instalada sobre el casco resistente del submarino después de Navantia, en enero del próximo año.
Después, se pasará a una última fase de pruebas de mar que contemplan, detalla la Armada, una primera salida en superficie, seguida de una inmersión estática en la que se comprobará el equilibrio del submarino para, posteriormente, realizar diversas salidas hasta llegar a probar todos los equipos del submarino hasta la cota máxima operativa.