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La ministra destacó que la industria de defensa es un sector que representa el 6% del PIB industrial y “fortalece la base industrial y tecnológica y contribuye de manera importante a la actividad económica y la generación de empleo” El sector, añadió, está “al servicio de la seguridad y defensa de los ciudadanos”, jugando “un papel determinante para el cumplimiento de nuestros compromisos en materia de seguridad y defensa común”.  Maroto aseguró que los gobiernos tienen “la obligación de defender y proteger los intereses estratégicos nacionales”, a la vez que deben garantizar “una capacidad industrial y militar suficiente” para hacer frente a los desafíos y emergencias existentes.