Este contrato, gestionado por la Dirección General de Armamento y Material (DGAM), busca cubrir el hueco de al menos seis meses entre el final de la vida del sistema de satélites francés Helios II, prevista este mismo mes de diciembre de 2021, que en la actualidad proporciona a Defensa capacidad de observación terrestre desde el espacio (SEOT), y la entrada en servicio para España en el segundo semestre de 2022 de la constelación también gala Componente Especial Óptico (CSO), formada por tres satélites, dos de alta resolución y un tercero de muy alta resolución.