El Servicio Nacional Aeronaval (Senan) de Panamá expresó su solidaridad con la Armada de México por el accidente del Buque Escuela Cuauhtémoc, que chocó el sábado pasado contra el puente de Brooklyn (Nueva York) durante una maniobra de zarpe que dejó dos muertos.“El Servicio Nacional Aeronaval de Panamá se solidariza con la Armada de México ante el lamentable accidente ocurrido con el Buque Escuela Cuauhtémoc en los Estados Unidos”, manifestó el Senan.El cuerpo de seguridad encargado de la custodia del espacio aéreo y marítimo de Panamá destacó que al Senan y la Armada mexicana les une el vínculo de la hermandad y cooperación y el estar formados en los mismos valores de honor, deber y servicio.“Acompañamos con respeto y fraternidad el dolor de nuestros hermanos de mar y de sus familiares en esta difícil travesía.
Durante la quinta edición de la Feria Aeroespacial México (Famex) 2025, el comandante de la Fuerza Aérea Guatemalteca (FAG), el general de brigada José Enrique Ruiz Morales y otros oficiales guatemaltecos realizaron una evaluación del helicóptero Leonardo AW139, con el interés de buscar un reemplazo para los Bell UH-1H y 212 que actualmente opera Guatemala.Para la evaluación se contó con un modelo de la versión civil de la aeronave, facilitado por la empresa mexicana Aeroservicios Especializados (Asesa) y empleado en operaciones offshore.
En su reciente visita a Panama, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, indicó que el Gobierno estadounidense "no permitirá que la China comunista ni ningún otro país amenace el funcionamiento ni la integridad del Canal de Panamá" y aseguró que se fortalecerá la cooperación en defensa y seguridad con el país centroamericano.Durante el acto por la remodelación del muelle 3 de la Base Naval Capitán de Fragata Noel Antonio Rodríguez —inversión de más de 5 millones de dólares— Hegseth señaló que el Canal de Panamá enfrenta hoy amenazas constantes, y destacó que unidades militares, con base en Estados Unidos, participan en ejercicios conjuntos, planificación y otras formas de cooperación con Panamá y sus socios, tanto en el lado del Atlántico como del Pacífico del canal, en el marco de Panamax 2025.Por otra parte, un buque de la Guardia Costera estadounidense transitará por el canal esta semana para realizar operaciones antinarcóticos en el Pacífico Oriental.
Ambas fases incluyen intercambio de información, programas de capacitación y entrenamiento además de actividades sociales y ayuda humanitaria.En años anteriores la participación sumó miles de militares de al menos 17 países americanos en los simulacros de protección del Canal de Panamá, una vía relevante del comercio internacional que presta servicio a más de 180 rutas marítimas, al conectar 170 países y con unos 1.920 puertos de todo el mundo.En el marco de estos ejercicios y de la celebración de la Conferencia de Seguridad Centroamericana (Centsec) entre el 8 y el 10 de abril, se anunció también la visita a Panamá del secretario de Defensa de Estados Unidos, Peter Hegseth, la próxima semana.CoyunturaEstos ejercicios militares y de seguridad pública tienen lugaren medio de los roces entre la administración local y el gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, por el presunto control chino sobre el Canal.
Autoridades de Costa Rica y Panamá se reunieron en Ciudad de Panamá con el objetivo de fortalecer la seguridad por medio de acciones conjuntas, sobre todo, en rubros de narcotráfico, temas migratorios y lucha contra la trata y tráfico ilícito de personas.El ministro de Seguridad Pública de Costa Rica, Mario Zamora, indicó que el objetivo del encuentro con autoridades panameñas de Migración y del Servicio Nacional Aeronaval (Senan) es mejorar la participación del país en operaciones paralelas, además de operaciones conjuntas con las autoridades panameñas en la lucha contra el narcotráfico procedente esencialmente de Sudamérica.El funcionario señaló que este encuentro se da en medio de conversaciones y del reconocimiento que Costa Rica ha recibido por parte de la Unión Europea en su lucha antidrogas, al reducir el envío de cocaína a los puertos de Amberes (Bélgica) en 70 % y de Róterdam (Países Bajos) en 50 %.Zamora agregó que las autoridades panameñas se mostraron muy interesadas en conocer los detalles de la Operación Soberanía y la forma en que fue implementada, así como la manera en la que el Gobierno costarricense ha abordado los escenarios de trabajo en la lucha antidrogas en los puertos.El tema migratorio también fue abordado de manera conjunta; ambos países están sufriendo los efectos de este fenómeno.
Además trasladarán personal para la ceremonia de donación del centro de salud de Playón Chico, financiado por el programa de asistencia humanitaria del Comando Sur. Las unidades también llevarán alimentos, insumos médicos y personal de salud de Estados Unidos y Panamá para realizar giras médicas programadas en las comunidades de Sardinilla y Escobal (provincia de Colón), donde se espera brindar servicios de salud a cerca de 1.000 personas. Aparte, se suministrará un generador de energía para la estación de los Guardacostas del Servicio Nacional Aeronaval (Senan), en la isla del Rey, en el archipiélago de Las Perlas, en el océano Pacífico.Por su parte, los aviones C-17 transportarán botes, equipos y personal de apoyo para ejecutar actividades rutinarias de seguridad bilateral y realizarán ejercicios conjuntos con las fuerzas de seguridad panameñas.De acuerdo con la información oficial del Southcom, estas actividades forman parte de los esfuerzos de cooperación entre ambos países, para apoyar a Panamá con el transporte aéreo de insumos esenciales a comunidades remotas, así como para fortalecer la respuesta conjunta ante desastres naturales. En ese sentido, Panamá y Estados Unidos habitualmente realizan programas humanitarios para ampliar el acceso a salud y educación de la población en comunidades de difícil acceso, contribuyendo así a la paz, estabilidad y prosperidad de la región.
El Super Tucano es concebido como el sustituto lógico del Cessna A37B Dragonfly, el bombardero aún operado, sobre todo por El Salvador, que tiene la mayor flota operativa en la región centroamericana y caribeña, con al menos 10 aviones para tareas de vigilancia e interdicción de vuelos sospechosos de contrabando y narcotráfico.Conocedores en la materia saben que el A37 ha dejado de ser una opción rentable, pues la escasez de repuestos y su costosa hora de operación de vuelo, posiblemente hasta tres veces más que la del Super Tucano, lo han hecho una alternativa altamente obsoleta y costosa para los precarios presupuestos militares anuales de Guatemala, Honduras y El Salvador.Sin objetivo bélicoEl Senan indicó que no existe ningún objetivo bélico o de combate dentro de las especificaciones que Panamá ha requerido en la compra de las aeronaves que entrarían a reemplazar la flota existente, integrada por unas 14 aeronaves que datan de la década del '80 (del siglo pasado) y cuyo mantenimiento representa altos costes para el Estado panameño: alrededor de 10 millones de dólares cada año.El organismo señaló que la compra a Embraer totaliza 78,2 millones de dólares y la de Airbus 109,2 millones de dólares, y —en su mayoría— se hará con financiación externa.
Una delegación del Servicio Nacional Aeronaval (Senam) de Panamá visitó República Dominicana a finales de septiembre con el propósito explorar la posibilidad de adquirir el avión de entrenamiento y patrullaje TP-75 Dulus, que se ensambla en las instalaciones de la Fuerza Aérea del país caribeño. La comisión panameña, encabezada por el director general del Senam, comandante Luis Antonio De Gracia, fue recibida por el subcomandante general de la Fuerza Aérea de República Dominicana (FARD), general de brigada Manuel García Lithgow.