La fragata antisubmarina Type 23 FF-06 Almirante Condell de la Armada de Chile retornó al puerto base de Valparaíso tras concluir el proceso de modernización de sus sistemas de mando y control, sensores y defensa antiaérea local y de punto en la planta industrial Talcahuano de Astilleros y Maestranzas de la Armada (Asmar).El buque, como publicó Infodefensa.com, inició su modernización en septiembre de 2020 y es la tercera y última de las tres fragatas antisubmarinas Type 23 de la Escuadra Nacional que incorpora una nueva generación de sistemas que mejoran e incrementar sus capacidades y asegurar su vigencia operativa por los próximos 20 años.El proyecto Pidaa es el programa más complejo que ha desarrollado un astillero sudamericano en los últimos años y permite a la institución mejorar de manera ostensible la capacidad de estos buques para detectar y enfrentar con éxito las amenazas conocidas y proyectadas en el campo de batalla naval.El proyecto contempló la instalación del sistema de gestión de combate CMS 330 de Lockheed Martin Canada, el radar naval multifunción de vigilancia y adquisición de blancos TRS-4D de Hensoldt, el misil antiaéreo/antimisil de guía activa CAMM de MBDA, sistemas tácticos de enlace de datos Link 16 y Link 22 de Viasat y el interrogador de radar secundario naval MSSR 2000 I y el transpondedor LTR400DNG de Hensoldt.La llegada de nuevas tecnologías que no existen en Latinoamérica ha generado un gran impacto en los procesos de integración de equipos y contribuye al crecimiento profesional y técnico de la Armada de Chile para afrontar programas como la renovación de los buques de la Escuadra Nacional por unidades construidas en el país a partir de la próxima década.Un ambicioso programaLa Armada de Chile formuló a comienzos de 2015 una solicitud de información (RfI) a diversas empresas internacionales para integrar en las fragatas Type 23 una nueva generación de radares tácticos, sistemas de gestión de combate (CMS) y misiles antiaéreos de guía activa.En 2017 fue seleccionado Lockheed Martin como integrador principal del sistema de gestión de combate CMS 330, el misil CAMM de MBDA y el radar naval multifunción de vigilancia y adquisición de blancos TRS-4D de Hensoldt.El proyecto se inició en 2018 y fue desarrollado en conjunto con Asmar.