El Instituto Armada recuerda en la memoria justificativa del contrato que entre los equipos que necesitan sus unidades se encuentran “los cascos antidisturbios y máscaras antigás, como medio de autoprotección que se emplea en manifestaciones, reuniones, para la protección de los agentes del Cuerpo frente a lanzamiento de objetos, sustancias peligrosas como ácidos, productos químicos o gases lacrimógenos consiguiendo así una mayor operatividad y efectividad en la realización de los diferentes servicios”.
El Oteos también ha sido seleccionado por el Servicio de Armamento de Guardia Civil para la vigilancia de fronteras de Ceuta y Melilla y por el Servicio Marítimo para su instalación en embarcaciones de mediana y gran altura que luchan contra la inmigración ilegal y el tráfico de mercancías ilegales a lo largo de la costa mediterránea y en los archipiélagos de Baleares y Canarias para vigilar las aguas españolas y su entorno.
Contrato a la tercera La Guardia Civil logra comprar fusiles de asalto, después de dos intentos fallidos.