Se trata de una iniciativa, lanzada por los gobiernos de Bélgica y Francia en 2019, en la que la firma francesa Nexter actúa como contratista principal industrial con sus subcontratistas estratégicos Arquus y Thales.
Nexter también fabrica el cañón de 40 mm del Jaguar y su munición telescópica, además de distintos equipos para vehículos, incluidos los sistemas de protección CBRN, la electrónica y las computadoras a bordo y los sistemas de visión.
Estos números suponen en torno a la mitad del compromiso total del gobierno francés para los Jaguar y Griffon, (excluyendo la variante Mepac) que está previsto adquirir en el marco del programa Scorpion, al que se le estima un coste en conjunto superior a los 6.000 millones de euros hasta el año 2033, lo que le convierte en uno de los más destacados de este tipo en marcha actualmente en el mundo.