La ayuda de la población civil en la defensa de la ciudad fue clave en el enfrentamiento.El 4 de mayo de 1589, las naves inglesas entran en el puerto de La Coruña, mientras que San Juan, Princesa y Diana, apoyadas por las baterías del fuerte, cañoneaban a los enemigos y les mantenían alejados.
La Pragmática Sanción decía lo siguiente:I. Prohibir hablar, leer y escribir en arábigo en un plazo de tres años.II. Anular los contratos que se hicieran en aquella lengua.III. Que los libros escritos en ella, que poseyeron los moriscos, fueran presentados en un plazo de treinta días al presidente de la Chancillería de Granada, y que, una vez examinados, se devolvieran los que no tuvieran inconveniente en poseer personas creyentes para que sus propietarios los poseyeran otros tres años.IV. Que los moriscos se vistieran a la castellana, no haciéndose "marlotas", "almalafas" ni calzas, y que sus mujeres fueran con las caras destapadas.V. Que en bodas, velaciones y fiestas semejantes siguieran las costumbres cristianas, abriendo ventanas y puertas, sin hacer zambras, ni leilas, con instrumentos y cantares moriscos, aunque éstos no fueran contrarios al cristianismo.VI. Que no celebrarán el viernes.VII. Que no usasen nombres y sobrenombres moros.VIII. Que las mujeres no se alheñasen.IX. Que no se bañaran en baños artificiales y que los existentes se destruyeran.X. Que se expulsase a los "gacis" (moros del norte de África) y que los moriscos no tuvieran esclavos de este linaje.XI. Que se revisarán las licencias para poseer esclavos negros.
Tal día como hoy, 10 de agosto, pero de 1557, se libra la batalla de San Quintín, una contienda que enfrentó a españoles y franceses en el marco de las Guerras italianas.
La batalla tuvo lugar en la localidad francesa de Gravelinas, en la costa del Mar del Norte, a unos 25 kilómetros de Dunkerque.El ejército francés, enviado por Enrique II de Francia, se preparaba para una gran ofensiva con el objetivo de retomar territorios en el norte del país frente a los ingleses que ocupaban la zona.
No obstante, se trataba de naves enviadas por el sultanato wattásida, que pasaron a la guarnición a cuchillo una vez consumado el engaño. Dueños del doble enclave, insular y terrestre, Mohammad ben Al Mançour se hizo con el peñón. Entre 1525 y 1563 hubo varios intentos por parte de los españoles para recuperarlo, son éxito, hasta que finalmente lo lograron el 6 de septiembre de 1564, bajo el reinado de Felipe II. García Álvarez de Toledo Osorio, IV marqués de Villafranca del Bierzo y virrey de Cataluña recuperaron el peñón de Vélez de la Gomera por orden del rey.