El camino a nuevas alianzas KNDS acaba de completar el cambio legal de su denominación, de modo que ya han quedado disueltos los nombres de la alemana Krauss-Maffei Wegmann (KMW) y la francesa Nexter con los que se operaba previamente.
Estos son algunos de los movimientos que se están produciendo en el entorno de los países aliados de Ucrania para ampliar la flota de carros de combate de factura occidental que ya ha recibido el país.
El portavoz del Partido Verde alemán, Sebastian Schäfer, ha revelado que “únicamente un pequeño número de los carros de combate suministrados pueden ser todavía empleado por Ucrania”, en alusión a los 18 Leopard 2A6 que su país ha enviado a las fuerza ucranianas para hacer frente a la invasión rusa.
La revista alemana Spiegel ha recogido que el nuevo acuerdo supondrá la gestión de contratos por valor de 50.000 millones de euros y conlleva la instalación de una nueva planta de producción para el Leopard en Italia.
Ante las nuevas amenazas (drones armados, armas autónomas, ciberataques, etc.), el objetivo del nuevo sistema multiplataforma es crear un entorno de combate en el que los combatientes comprendan, decidan y actúen más rápidamente que el adversario para ser más eficaz y estar mejor protegido.
En cambio, los Abrams se han hecho esperar más de seis meses más, tal y como se previó entonces que ocurriría, a pesar de que Estados Unidos optó en ese momento por facilitar unidades ya disponibles en su inventario, en vez encargar su fabricación, como previó en un primer momento, y que hubieran ralentizado mucho más los envíos.
Pistorius se ha referido directamente al proyecto que recientemente ha trascendido y en el que también está implicado Alemania, junto a España, Italia y Suecia, pero ha incidido que en este caso se trata de una iniciativa de empresas, no de gobiernos, a diferencia del MGCS, que además, está “mucho más avanzado”.
Al descender al detalle de lo que ha trascendido sobre el nuevo acuerdo se incrementan las sospechas de que París no debe de haberlo recibido con mucho entusiasmo, ya que el proyecto estará dirigido por las compañías alemanas Krauss-Maffei Wegmann (KMW) y Rheinmetall, que son las responsables del Leopard 2, y que en el caso de KMW está fusionada con la francesa Nexter dentro de la compañía KNDS, que en 2018 presentó el programa de futuro carro de combate europeo EMBT. En el nuevo acuerdo participarán, además de las citadas compañías germanas, Saab, por parte de Suecia, y Leonardo, por la de Italia, mientras que aún no ha trascendido el nombre de la empresa española implicada.
“El Consejo de Recursos de Defensa del Ministerio de Defensa Nacional, teniendo en cuenta el análisis de mercado detallado y la evaluación militar realizada por las Fuerzas Armadas de Lituania y la Agencia de Recursos de Defensa, ha aprobado proponer al Consejo de Defensa del Estado que envíe una carta de intención al Ministerio de Defensa alemán con respecto a la adquisición de tanques Leopard”, ha precisado Anušauskas.
De momento, Alemania, de donde ha partido la iniciativa para el desarrollo del nuevo carro, ya ha acordado que la República Checa se una a su acuerdo marco para la adquisición de estos blindados Leopard 2A8.
Proyectiles de 155 mm Por otro lado, coincidiendo con este acuerdo, la Bundeswehr también ha firmado con la compañía local Diehl Defense y la nórdica Nammo otro acuerdo marco para la obtención de munición de artillería de 155 mm, en concreto del proyectil explosivo Dina 155 mm, también con el propóstico de engrosar el arsenal nacional y ayudar a Ucrania.
Entre los argumentos esgrimidos por los críticos con la decisión se esgrime que estos blindados no proceden de Suiza, donde no han prestado servicio, y ni tan siquiera se encuentran ahora en el país.
Futura versión 2A8 El mes pasado se conocieron los planes alemanes para sustituir los 18 carros de combate Leopard 2A6 que ha enviado a Ucrania por una variante más avanzada de este modelo que el Leopard 2A7+, que es la última versión disponible, y de paso renovar su flota.
Nuevas compras Al menos Italia, la República Checa, Noruega, Lituania y Alemania se han interesado por la adquisición de más Leopard 2 tras el comienzo de la invasión rusa del país del este europeo el año pasado, e incluso algunos ya han llegado a formalizar su compra de este modelo desarrollado inicialmente en los años 1970 por KMW, que ahora se encarga de fabricar el casco, mientras que Rheinmetall se ocupa de la torre y el arma principal.
El Director Nacional de Armamentos del Reino Unido, Andy Start, ha suscrito con su homólogo alemán, el vicealmirante Carsten Stawitzki, una Declaración de Intención para cooperar en una nueva fase del programa de Energía Cinética Mejorada (EKE, por sus siglas en inglés), que se centra en el desarrollo de una “munición perforante que proporciona un cambio radical en la capacidad del Ejército para derrotar a las amenazas enemigas que están evolucionando”, en los términos recogidos por el comunicado emitido por el Ministerio de Defensa de Reino Unido sobre este acuerdo.
De este modo, la suma de carros de combate occidentales que se va a facilitar a Ucrania ya asciende a 238 unidades, ocho más de las citadas por Stoltenberg, al incluir los cinco de Grecia y tres adicionales de Portugal, recogidos por el balance que la firma analista neerlandesa Oryx mantiene actualizada.
Ante las expectativas que se abren, los dos gigantes alemanes de la fabricación de blindados se han citado en los juzgados para dirimir quién es el dueño de la propiedad intelectual del tanque que ambos producen. Krauss-Maffei Wegmann (KMW) , fabricante del casco, y Rheinmetall, encargado de la torre y el arma principal, tienen cita el próximo 2 de mayo ante el tribunal de Munich encargado de dirimir el conflicto.
En palabras del ministro interino de Defensa danés, Troels Lund Poulsen, “la coalición [para el suministro de carros Leopard 2 constituida por distintos países] juega un papel absolutamente central en la defensa de las fronteras de Ucrania, en la que el gobierno danés quiere participar y contribuir”, de ahí su participación en esta nueva compra de carros de combate, esta vez más modernos que la primera referida a los Leopard 1A5.
Las instalaciones se están levantando en la ciudad de Satu Mare, junto a la frontera de Hungría y a menos de 20 kilómetros de la de Ucrania.
En total, está previsto que el país reciba 171 carros de combate Leopard, de origen alemán, de los que 71 son del modelo más moderno Leopard 2 y los restantes del antiguo Leopard 1.