El Gobierno ha aprobado en el Consejo de Ministros la compra de dos nuevos Buques de Acción Marítima (BAM) para la Armada por 550 millones de euros. El Ministerio de Defensa en concreto ha obtenido el visto bueno del Ministerio de Hacienda para adquirir compromisos de gastos los próximos años que permitan financiar la construcción de las embarcaciones. El mismo procedimiento fue utilizado la semana pasada para autorizar la compra de los nuevos aviones de vigilancia y patrulla marítima del Ejército del Aire y del Espacio.
Durante su años de servicio en la Armada, el buque ha participado en diferentes despliegues operativos y misiones internacionales como la operación Atalanta contra la piratería en Somalia (2012), la lucha contra la piratería en el Golfo de Guinea (2014 y 2018), la guerra del Golfo durante el bloqueo naval impuesto por la ONU contra Irak (1991) y en la operación Perejil (2002).
Finalmente, el patrullero arribó al Arsenal de Cartagena con una dotación a bordo de 80 personas bajo el mando del último comandante del buque, el capitán de corbeta Narciso Donoso Alonso.El Infanta Elena en la regata Sail GP en Cádiz.
La Armada además ha tomado la decisión de retirar el próximo año el otro buque que queda en servicio de la antigua clase Descubierta, el Infanta Cristina. Tras un análisis, se concluyó que lo más eficiente es la jubilación de ambos buques a la vista del “esfuerzo de sostenimiento requerido para mantener la actual capacidad operativa”. El Infanta Elena es la tercera de la serie de seis corbetas de la antigua clase Descubierta y fue botado por la Empresa Nacional Bazán (hoy Navantia) el 14 de septiembre de 1976, entregada a la Armada en 1980 y recibió su bandera de combate precisamente en Alicante en junio de 1983.
Baja del Infanta Cristina, en 2023 Por su parte, el Infanta Cristina continuará en servicio en la Flota un año más, detalla la Armada, “hasta iniciar su proceso de baja previsiblemente en el segundo semestre de 2023”.