Unos meses antes, en julio, la Fuerza Aérea estadounidense adjudicó a Boeing un contrato para mejorar la preparación para la misión y el rendimiento del avión cisterna.
Pérdidas en el programa del KC-46A La empresa explica, en el balance que ha facilitado, que el margen operativo alcanzado durante el segundo trimestre de un 15,2% “refleja principalmente 1.000 millones de dólares de pérdidas en ciertos programas de desarrollo de precio fijo, incluida una pérdida de 391 millones de dólares en el programa [de avión de suministro de combustible en vuelo] KC-46A, impulsada en gran medida por una desaceleración de la producción comercial y restricciones de la cadena de suministro”.
Los problemas que acumulan los KC-46 desde antes de sus primeras entregas, que derivan en retrasos y sobrecostes, se apuntan como los motivos principales por los que Italia se ha decidido por suspender la compra prevista.
De este modo, el país transalpino se apea del programa de la polémica aeronave de Boeing, que lleva acumulados una serie de problemas de entidad en los últimos años, y se queda sin sustituto para los cuatro KC-767A con los que sigue operando en la actualidad.
Leonardo DRS se encargará de fabricar las nuevas unidades de AROS 2.0 para entregárselas a Boeing, que se encargará de instalarlas en los aviones.
Ante estas circunstancias no ha sido posible entregar todavía los dos aviones de prueba que deben sumarse a uno ya suministrado, y que resultan necesarios para iniciar los ensayos de vuelo por parte de la USAF. El portal Breaking Defense recuerda que el inicio oficial de producción del nuevo modelo, previsto para el pasado diciembre, ya fue retrasado el año pasado hasta febrero de 2025.
Los aviones de origen comercial A330 que Airbus emplea como base de sus MRTT, en los que se basa el diseño del LMXT, son habilitados para su nueva función militar en la planta que la firma europea tiene en la localidad de Getafe, en la comunidad española de Madrid.
Boeing ganó el programa de suministro de hasta un total de 179 aparatos, denominado KC-X, a principios de 2011, después de que la compañía apelase la primera adjudicación, que daba como ganador a un consorcio formado por EADS (actual Airbus) y Northrop Grumman, ofertantes del modelo europeo A330 MRTT. La alternativa de Airbus y Lockheed Con los problemas que aquejan al programa del KC-46A de fondo, la firma Lockheed Martin, competidor de Boeing, movió ficha en 2018 junto a la compañía europea Airbus para volver presentar el avión A330 MRTT de esta última, que ya se encuentra operativo, como solución alternativa para el suministro en vuelo en Estados Unidos.
Tras el acuerdo con Boeing para la producción de 179 aviones KC-46, en un proceso que inicialmente ganó Airbus pero fue recurrido, la USAF prevé un nuevo tramo de entre 140 y 160 aparatos, con los que seguir sustituyendo a la anticuada flota de cientos de aparatos KC-135 que llevan décadas prestando servicio.