Aquí, en España, la decisión sobre la compra del F-35B, en una operación que también podría incluir el F-35A al Ejército del Aire y del Espacio, no termina de concretarse, a pesar de que la Armada ha insistido en que el caza norteamericano representa la única alternativa hoy por hoy al Harrier. Pero volviendo a los sistemas no tripulados, Turquía no es la única que ha embarcado drones en sus buques.
Además, servirán "para mostrar la capacidad de la Armada para liderar y proyectar una fuerza expedicionaria en y desde la mar y en su caso, integrar e interoperar con otras unidades o agrupaciones del resto de países de la Alianza".La agrupación estará formada por todos los vectores que componen una fuerza de proyección del poder naval sobre tierra: buques anfibios tipo LHD y/o LPD -Juan Carlos I, Castilla y Galicia- con una fuerza de Infantería de Marina embarcada de entidad batallón reforzado y una unidad médica completa de role 2; fragatas F-100 y F-80; aviones de combate Harrier, helicópteros de transporte táctico y un buque de aprovisionamiento para el combate.Despliegue de un helicópteros de transporte táctico del Grupo Dédalo.
La Armada tiene previsto iniciar en torno a 2029 un programa para la adquisición de tres buques conocidos por el momento como LXX o nodriza.
Entrando en detalle, el listado revelado por la Armada incluye programas nuevos dirigidos a la compra de buques para aumentar los medios y capacidades de la Flota.
Se trata de un buque de transporte anfibio dotado de cubierta para aeronaves para operar con helicópteros y también preparada para los citados F-35B, con una cubierta de garaje que en parte puede actuar como muelle y acoger embarcaciones de desembarco anfibio LCM. Programa de mejora de capacidades En tiempos de paz, añade la información divulgada por Fincantieri, el Trieste puede desplegar “sus excelentes capacidades en operaciones de socorro en casos de desastre, humanitarias y SAR”, siglas en inglés de búsqueda y rescate.
De acuerdo con los datos conocidos de la prueba, que tuvo lugar la semana pasada, el TB3 despegó de la cubierta del TCG Anadolu en un punto situado entre el mar Egeo y el Mediterráneo para realizar un vuelo de unos 45 minutos antes de aterrizar en la pista corta del propio buque sin precisar de ningún medio de apoyo adicional.
La plataforma de vuelo contará con tres pistas: dos para despegues y una tercera para los aterrizajes, de modo que los aviones empleen el sistema de despegue corto y recuperación mediante cables de frenado conocido por las siglas en inglés Stobar.
Alrededor de 11.000 visitantes tuvieron la oportunidad el Día de la Fiesta Nacional en Barcelona de explorar a fondo el LHD Juan Carlos I, el buque insignia de la Armada, durante una jornada de puertas abiertas. El éxito de la visita del LHD Juan Carlos I, uno de los buques más emblemáticos y avanzados de la Armada, se produce poco después de la escala del buque escuela de la Armada, el Juan Sebastián de Elcano, el pasado septiembre, que esa ocasión atrajo a más de 10.000 visitantes. Los visitantes pudieron disfrutar de un recorrido a bordo del Juan Carlos I, donde se exhibieron aviones de despegue vertical Harrier, helicópteros y vehículos tácticos de Infantería de Marina. Visita del rey Felipe VITras el aluvión de público el 12 de octubre, al día siguiente la presencia del rey Felipe VI a bordo del buque portaeronaves para seguir las regatas finales de la Copa América puso el colofón a la escala de la Armada en Barcelona en apoyo precisamente al desarrollo de este importante evento. Desde la Armada destaca que la visita del Rey, acompañado por el Almirante Jefe de Estado Mayor de la Armada, almirante general Antonio Piñeiro Sánchez, y las principales autoridades autonómicas y locales, "no hizo sino poner aun en más valor este evento clave para el deporte y para la difusión de la cultura marítima y de la ciudad condal.Durante su estancia en el buque, Felipe VI presenció la toma de cuatro aviones navales Harrier en el buque para, a continuación, comenzar el movimiento hacia el campo de regatas.
Durante su estancia en Barcelona, el buque llevará a bordo aviones de despegue vertical Harrier, helicópteros, vehículos tácticos de Infantería de Marina y embarcaciones de desembarco, por lo que los visitantes podrán conocer de primera mano las capacidades y medios del buque. "Para la Armada, estas dos visitas tienen una especial relevancia puesto que la presencia en Barcelona, antes del Juan Sebastián de Elcano y ahora del Juan Carlos I, refuerza los lazos históricos de la institución con la ciudad a la vez que materializa su apoyo a la Copa América de Vela", subraya la propia Armada en una nota.La participación en este evento pone de relieve su compromiso con la promoción de la cultura naval y la formación marinera.
El LHD completó en julio un exigente despliegue de tres meses y medio al frente del Grupo de Combate Expedicionario Dédalo en el que recorrió todo el flanco marítimo de la OTAN, desde Estambul en el Mediterráneo hasta Helsinki en el Báltico, trabajando con las marinas y fuerzas armadas de 28 de los 32 aliados y participando en los principales ejercicios de la OTAN. El Juan Carlos I es el único buque de la Armada preparado para operar con aviones.
A lo largo de los tres meses y medio que ha durado el despliegue, el Grupo ha cubierto todo el flanco marítimo de la OTAN, desde Estambul en el Mediterráneo hasta Helsinki en el Báltico, trabajando incesantemente con las marinas y fuerzas armadas de 28 de los 32 aliados y participando en los principales ejercicios de la OTAN. Entre estos, destacan Neptune Strike, en el que, durante dos semanas y bajo mando aliado, el Grupo “Dédalo” trabajó codo con codo con los grupos de portaaviones del Charles de Gaulle (Francia) y del “Cavour” (Italia) llevando a cabo misiones aéreas sobre los países del flanco este de la Alianza.
Grupo de Combate Dédalo En la segunda parte del despliegue, el Grupo Dédalo está formado por el portaaeronaves Juan Carlos I, el buque de asalto anfibio Galicia, aviones Harrier y helicópteros de la Flotilla de Aeronaves de la Armada, un Batallón Reforzado de Desembarco de Infantería de Marina y la fragata Santa María.
El medio especializado Naval News recoge que la intención de la Oficina de Proyectos de Diseño turca es instalar en el barco con una rampa modular para facilitar los despegues, siguiendo la fórmula empleada en buques como el Juan Carlos I, y que replica el TCG Anadolu turco basado en él.
El Departamento de Defensa de EEUU ha adjudicado dos contratos para mantener los McDonnell Douglas Harrier de la Armada española hasta 2028 en el caso del primero, que será básicamente de sostenimiento estructural y actualizaciones, y 2029 del segundo, que afectará al sistema de armamento.
De acuerdo con los planes conocidos antes de que al fin se haya confirmado oficialmente la construcción de un nuevo portaaviones, lo previsto es que se trate de una versión superior al TCG Anadolu, basado a su vez en el trabajo de la compañía española Navantia en el Juan Carlos I. La información que ha trascendido acerca de estos proyectos turcos no habla de nuevos submarinos, sobre los que Turquía y España acordaron estudiar una posible colaboración para un nuevo programa a medio plazo con los que dotar al primero con un diseño basado en el S-80 de la Armada española, del que Navantia entregó la primera unidad a finales del pasado octubre.
Submarinos también a la vista Al mismo tiempo, Turquía y España acordaron estudiar una posible colaboración par aun nuevo programa de submarinos a medio plazo con los que dotar al primero, y que estarían basados en el S-80, también de Navantia, cuya primera unidad para España está previsto entregar a la Armada el día 30 de este mes.
La Flotilla de Submarinos de la Armada cuenta en la actualidad con dos buques en servicio, el S-71 Galerna y el S-74 Tramontana, ambos muy veteranos operativos desde hace cuatro décadas.
La declaración de intención suscrita por Ámsterdam y Londres “hará que las naciones socias trabajen juntas para comprender los requisitos conjuntos respectivos y los plazos esperados para el MRSS del Reino Unido y la plataforma de aterrizaje holandesa”, en alusión a sus buques de la clase Rotterdam.
Su puesta en servicio se ha visto retrasada por acontecimientos como el incendio que afectó a la nave en 2019, cuando aún se encontraba en el astillero, y como consecuencia de las medidas de seguridad sanitaria adoptadas como consecuencia de la covid 19.
Este ejercicio multidominio, organizado por el Naval Striking and Support Forces NATO (Strikfornato), tiene como objetivo " poner a prueba la habilidad para integrar las capacidades que ofrecen los Grupos de Combate de los portaaviones para la defensa de la Alianza Atlántica", señala el Estado Mayor de la Defensa. Estas actividades reflejan el compromiso, mejoran la interoperabilidad y la cohesión de las naciones aliadas y además, incrementan la posición de disuasión y presencia de la OTAN en el Mediterráneo.El Grupo Expedicionario de Combate español aportará las capacidades del LHD Juan Carlos I, la fragata Blas de Lezo, la aviación embarcada, formada por cazas Harrier y helicópteros (Chinook, Tigre, SH60B y SH60F), y el Batallón de Desembarco, con medio millar de militares de Infantería de Marina, y diferentes embarcaciones para realizar ejercicios anfibios.