Existen distintos tipos de cargas según el proyectil a disparar y el alcance previsto.Pedidos en 2024Solo en lo que va de año, la compañía ha suscrito con el Ejército de Tierra cuatro contratos de entidad para dotar a las unidades de artillería de granadas de mortero por 58 millones; munición de 155 mm por más de 200 millones de euros -proyectiles HE y espoletas, principalmente-; munición de 155 mm por 90 millones -en este caso, proyectiles fumígenos, iluminantes y cargas de proyección-; y munición de 105 mm por 46 millones de euros. La compañía además ha anunciado que producirá la munición de los nuevos lanzacohetes Silamdel Ejército de Tierra por 300 millones de euros.
El contrato establece que las entregas de los programadores, de los que no se especifica el número, se producirán a lo largo de 2025. El tiempo de transferencia de datos entre el programador y la espoleta será, como máximo, de tres segundos, contados desde que el usuario presiona el cabezal del programador sobre la espoleta.
Por un lado, la empresa apuesta por ampliar la cartera de munición de 120 mm para carro de combate y, por otro, pondrá en marcha una línea de nitroglicerina con el objetivo ganar autonomía y reducir la dependencia en un mercado como el actual con pocos suministradores y una gran demanda de materias primas por el incremento de los pedidos de munición a nivel mundial. En el caso de la munición de 120 mm, FMG ya ha producido disparos de este calibre con licencia de terceros y ahora apuesta por un producto propio.
En este contexto, el fabricante alemán Rheinmetall ha recibido el mayor encargo de su historia: 8.500 millones de euros en proyectiles de 155 mm para Fuerzas Armadas de Alemania (Bundeswehr) y que en parte también irán a alimentar los ejércitos de Ucrania, Países Bajos, Estonia y Dinamarca.
El Ejército de Tierra ha adjudicado a Rheinmetall Expal Munitions un nuevo contrato de munición, el cuarto en lo que va de año, para el suministro de hasta 28.000 proyectiles de 155 mm y 38.000 cargas del mismo calibre para los obuses de las unidades de Artillería de Campaña por un importe de 90,7 millones de euros (impuestos incluidos).
El Ejército de Tierra ha formalizado un nuevo contrato con la empresa Rheinmetall Expal Munitions para reforzar sus stocks de munición.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha confirmado que en apenas cuatro días llegarán a la base logística que gestiona las entregas de material al Gobierno de Kiev "un conjunto de misiles interceptores antiaéreos Patriot de largo alcance". El ministerio no detalla el número de misiles Patriot que entregará a Ucrania. El Ejército de Tierra, hay que recordar, ya forma en suelo español a militares ucranianos en el uso de este sistema de defensa antiaérea. Esta misma semana, anunció Robles, se han enviado medicinas hospitalarias y de kits individuales de primeros auxilios en combate y una nueva remesa de munición de artillería de grueso calibre, a la que seguirán otros envíos de munición de 155 y 120 mm los próximos meses. La ayuda española prevista para los próximos dos meses incluye ametralladoras ligeras y pesadas, vehículos logísticos protegidos sobre ruedas, vehículos acorazados de infantería, armamento contra carro y obuses de artillería de campaña. Leopard para final de junioA estos envíos seguirá el suministro de diversos sistemas de vigilancia antiaérea y estaciones de armas remotas para defensa contra drones, sistemas que está preparando la industria española de defensa.
El Ejército de Tierra ha decidido ampliar el plazo para presentar ofertas al contrato de suministro de munición de artillería de campaña de calibre 155 mm para sus obuses M109 y SIAC valorado en 150 millones de euros.Las compañías interesadas en participar en la licitación tienen todo el mes de enero, hasta el 31, para presentar sus propuestas al Mando de Apoyo Logístico del Ejército (MALE), responsable del expediente.
El Mando de Artillería de Campaña (MACA) del Ejército de Tierra ha efectuado recientemente los primeros disparos con munición Excalibur en los obuses de 155 mm en servicio, el autopropulsado M109 y el remolcado SIAC. Tras estas pruebas, el foco está puesto en un nuevo hito: integrar esta nueva capacidad en la artillería española y emplear la nueva munición para abatir con precisión objetivos en movimiento.Para ello, el Ejército de Tierra tiene previsto adquirir la variante Excalibur-S que incorpora un guiado láser semiactivo terminal que supone una evolución del actual proyectil.
Este tipo de arma se utiliza con frecuencia en la ejecución de ejercicios tácticos, incluidos en los denominados Planes Generales de Instrucción y Adiestramiento. Los morteros permiten, por ejemplo, abatir los objetivos más cercanos en el puesto de combate avanzado (COP), asegurando la libertad de acción de las fuerzas propias. Pedidos a Expal en 2023El Ejército de Tierra ha cerrado varios pedidos de munición y proyectiles de distinto tipo con Expal en lo que va de año, dentro de su plan para incrementar los stocks de sus arsenales y polvorines. En noviembre, el Mando de Apoyo Logístico del Ejército adquirió cargas de munición de 105 mm para los obuses Light Gun de este calibre en servicio en las unidades de artillería.
El presupuesto del programa Estra fue aprobado en septiembre en el Consejo de Ministros. Defensa explicó entonces que "las Fuerzas Armadas necesitan un medio eficiente para ser empleado en las ocasiones en las que la dispersión de la munición deba ser reducida, con el fin de reducir los daños colaterales".
Los 1,5 millones de euros anuales de pérdidas en el momento de la llegada de la empresa nórdica contrastan con el beneficio neto de cerca de 9 millones en 2022, una cifra que será muy similar este año, según las previsiones.Proyectos en marcha La compañía trabaja en la actualidad un proyecto junto con Escribano en el desarrollo de una solución antidrón basada en la estación de armas remotaGuardia 2.0 de la empresa madrileña y la munición de 40x53 mm Hedp-Rf de Nammo Palencia.
El proyectil, en este caso, describe una parábola ascendente para salvar el obstáculo y, en el descenso, retrocede para atacar el blanco (ángulo de tiro modulable)".La munición deberá ir acompañada de los sistemas de adquisición de objetivos que proporcionen la precisión necesaria para el empleo de estas municiones guiadas. El margen de error es mínimo, entre dos y tres metros, lo que reduce también los márgenes de seguridad del personal propio que se encuentra próximo a la zona del objetivo y reduce al máximo el potencial de daño colateral.
Su entrada en servicio hará posible que el Ejército cuente con esta capacidad como Fuerza Posible antes de 2024 y que se pueda consolidar como Fuerza Avanzada en 2030.Tierra también pone en valor el trabajo de la Sección de Armamento, Sistemas de Artillería y Municiones (Sasamu), de la Dirección de Adquisiciones (DIAD) del MALE, que ha hecho posible materializar esta entrega. El personal del Mando de Artillería de Campaña (MACA) ya dispone de todo lo necesario para la formación y para alcanzar la capacidad inicial de este sistema.
El aumento de alcance y precisión buscan la superioridad de los medios de fuego indirecto para permitir a la Fuerza 2035 convertirse en una Fuerza de Ventaja y apoya la evolución de las capacidades militares recogidas en el Objetivo de Fuerza Conjunta (OFC).
Este es el segundo contrato que lanza en apenas una semana el Ejército de Tierra para la compra de granadas de este calibre.
Este tipo de munición es utilizada por las veteranas piezas de artillería autopropulsada M109 (155 mm), remolcada SIAC (155 mm) y Light Gun (105 mm) en servicio en las unidades.
Lo que ahora se ha adjudicado Rheinmetall es un nuevo contrato marco para el suministro de munición de artillería de 155 mm y la ampliación de un contrato marco existente.
Proyectiles de 155 mm Por otro lado, coincidiendo con este acuerdo, la Bundeswehr también ha firmado con la compañía local Diehl Defense y la nórdica Nammo otro acuerdo marco para la obtención de munición de artillería de 155 mm, en concreto del proyectil explosivo Dina 155 mm, también con el propóstico de engrosar el arsenal nacional y ayudar a Ucrania.