La fusión de los dos programas de aviones de combate de sexta generación en los que trabaja Europa, y por la que el consejero delegado de Airbus, Guillaume Faury, ha vuelto a apelar este mes, no solo no está clara, pese a las voces que advierten de que será la única forma de que el viejo continente pueda competir en el mercado, sino que en vez uno los proyectos podrían acabar siendo tres.
Suecia, por su parte, se unió al programa en 2022, y el año pasado, coincidiendo con la entrada de Alemania a la iniciativa, suscribió la siguiente etapa de preparación para la fase de adquisición en serie encargó 20 Patria 6x6, a lo que apenas unos días después se conocieron sus planes de adquisición de otros hasta 400 vehículos.
Las palabras de Faury defendiendo esa unión del FCAS y el GCAP, recogidas ahora por el diario británico The Guardian, renuevan la vieja aspiración, sobre la que en su momento también se pronunciaron, y apoyaron el jefe de la Fuerza Aérea de Italia y el de la alemana (Luftwaffe), y, entre otros, los responsables de la firma italiana Leonardo, ahora socia del GCAP y que en su momento reveló que su propósito de unirse a la iniciativa británica incluía una fusión de ambos programas en el futuro.
La alianza, que ha sido suscrita esta semana por los consejeros delegados de Damen Shipyards, Arnout Damen, y de Saab, Micael Johansson, “duplica las perspectivas de empleo e ingresos a largo plazo para el Clúster Naval Neerlandés con la sustitución de los submarinos Walrus por Saab-Damen”, informa la empresa de Países Bajos en un comunicado.
El secretario de estado de Comercio Exterior sueco, Håkan Jevrell, ha calificado el momento de “hito importante para Suecia y la India”, habida cuenta de que la nueva “fábrica de Saab será la primera instalación de producción de defensa de propiedad totalmente extranjera en la India”.
Entre los sistemas en los que MBDA y Saab ya han colaborado anteriormente se incluyen el programa de misiles aire-aire Meteor y el misil de crucero Taurus, además de la implicación en el consorcio europeo Marseus, concebido para proporcionar a Europa una capacidad de misiles más allá de la línea de visión (concepto conocido por las siglas en inglés BLOS).
La Fuerza Aérea Sueca se suma a las de Japón, Alemania, Reino Unido y Catar, entre otros, y formará a sus futuros pilotos de combate en la Escuela Internacional de Entrenamiento de Vuelo (IFTS), creada en 2021 en Italia por la compañía local Leonardo junto a la canadiense CAE. La operación ha sido suscrita, de forma telemática, en un acuerdo rubricado por el jefe de Estado Mayor de las Fuerzas Aéreas Italianas, el general Luca Goretti, y el jefe de Estado Mayor de las Fuerzas Aéreas Suecas, el general de División Jonas Wikman. En concreto, el documento contempla el envío de pilotos militares suecos a Italia, donde completarán su formación en un nivel básico en la base aérea de Galatina (Fases 2 y 3 del itinerario de entrenamiento), sede del Ala 61 de la Fuerza Aérea Italiana emplazada al sur del país, y de nivel avanzado (Fase 4) en el 212º Grupo IFTS, emplazada en la base aérea de Decimomannu, al sur de la isla de Cerdeña, informa el portal Italian Defence Technologies.
Los otros seis pilares del FCAS comprenden el desarrollo del motor que impulsará el futuro avión de combate; drones (conocidos en el programa como como portadores remotos, o remote carriers), que actuarán coordinados con el elemento principal; una nube de combate, que conectará todas estas aeronaves digitalmente; un sistema de simulación; los sensores que equiparán las nuevas plataformas y la tecnología de sigilo con la que se les dotará para que resulten lo menos detectables posible.
Na pauta sueca, aumentar a encomenda de caças F.39E/F Gripen destinados ao Brasil de 36 para 51 exemplares, um aditivo de 25% no contrato.
Con este acuerdo, suscrito por la compañía con la entidad sueca de adquisiciones militares, la Administración Sueca de Material de Defensa (FMV), se equiparán sus nuevas cinco corbetas clase Visby de la Marina Real Sueca, que operarán con los nuevos misiles desde sistemas de defensa aérea naval Sea Ceptor también de MBDA. El Sea Ceptor es un arma de defensa aérea naval de última generación, que proporciona una sólida defensa aérea de 360º local y propia contra amenazas simultáneas, incluidos ataques de saturación, explica el fabricante.
El director militar de la parte francesa del programa, el general de división Jean-Luc Moritz, ha asegurado que existe “un buen ambiente de trabajo y se están cumpliendo los plazos”, para aclarar a la prensa que no ve nada que le lleve a pensar que Berlín pudiera abandonar sus compromisos y pasar a formar parte del proyecto italo-británico-japonés GCAP, que compite con el FCAS, como se apuntó en el citado medio.
Las autoridades indias han aprobado el primer proyecto de inversión extranjera directa (FDI) en la India en el sector de defensa que es desarrollado y financiado íntegramente por una empresa del exterior del país.
Misión en Líbano La misión de la ONU en Líbano tiene entre sus cometidos vigilar el cese de hostilidades entre Hezbolá e Israel, asistir al Gobierno de Líbano para el ejercicio de su soberanía en el sur del país y acompañar y apoyar a las Fuerzas Armadas libanesas para proporcionar estabilidad y seguridad a la región y a lo largo de la ‘Línea Azul’, así como garantizar el acceso humanitario a las poblaciones civiles y el regreso voluntario y seguro de las personas desplazadas.
Ante el incremento de las tensiones bélicas en el mundo, la OTAN, en boca de su secretario general, Jens Stoltenberg, ha enviado un llamamiento para que los socios incrementen la producción de material militar.
En concreto, la firma local ha recibido una orden adicional de la Administración Sueca de Material de Defensa (FMV) “para garantizar el funcionamiento continuo y la mejora de la capacidad del Gripen C/D. El encargo está valorado en 579 millones de coronas suecas, que al cambio actual supone algo más de 49 millones de euros.
Las nuevas baterías de 24 voltios y 36 amperios-hora del Gripen E, que están diseñadas específicamente para esta aeronave por la firma estadounidense Eaglepicher, “cuentan con una capacidad de temperatura extremadamente baja y un ciclo de vida operativo extendido para un mayor tiempo en el ala y un mantenimiento reducido”, explica la compañía en un comunicado.
Está por definir cómo se plantearía entonces la formación de los pilotos que deberían operarlos, un asunto particularmente importante que para el caso de los F-16 ya está en marcha.
El acuerdo incluye la revisión del compromiso hasta ahora existente sobre el desarrollo y producción de la versión más moderna Gripen E agregando una nueva funcionalidad, que incluye cambios en los sistemas de guerra electrónica, comunicación y reconocimiento”, además de “cambios en los cronogramas de entrega” de todos los aparatos pendientes, tanto de la versión E como de la CD. Primer vuelo en 1988 La empresa, que es el fabricante de los aviones, destaca que se trata de unos “planes de desarrollo y entrega ajustados” con el objeto de “garantizar la capacidad operativa de combate de las Fuerzas Armadas Suecas”.
La nueva adjudicación, por tanto, “se basa en más de una década de cooperación exitosa entre Kongsberg, el gobierno polaco y la industria polaca”, explica la compañía sueca en un comunicado en el que también revela que las entregas se alargarán hasta la década de 2030.
Al descender al detalle de lo que ha trascendido sobre el nuevo acuerdo se incrementan las sospechas de que París no debe de haberlo recibido con mucho entusiasmo, ya que el proyecto estará dirigido por las compañías alemanas Krauss-Maffei Wegmann (KMW) y Rheinmetall, que son las responsables del Leopard 2, y que en el caso de KMW está fusionada con la francesa Nexter dentro de la compañía KNDS, que en 2018 presentó el programa de futuro carro de combate europeo EMBT. En el nuevo acuerdo participarán, además de las citadas compañías germanas, Saab, por parte de Suecia, y Leonardo, por la de Italia, mientras que aún no ha trascendido el nombre de la empresa española implicada.