Pistorius se ha referido directamente al proyecto que recientemente ha trascendido y en el que también está implicado Alemania, junto a España, Italia y Suecia, pero ha incidido que en este caso se trata de una iniciativa de empresas, no de gobiernos, a diferencia del MGCS, que además, está “mucho más avanzado”.
La publicación recuerda que el director general de Dassault Aviation, Eric Trappier, ha apuntado recientemente que el programa del FCAS sigue adelante, aunque con la advertencia de que ha de respetarse el liderazgo de su empresa en el desarrollo del futuro avión de combate del programa, lo que estuvo en buena parte detrás del desencuentro entre los socios que llevó el año pasado a paralizar el proyecto durante meses.
El acuerdo alcanzado ahora incluye la transferencia de tecnología a KNDS para que pueda producirlo localmente producción local y compartir trabajo en el lanzador y la integración en los sistemas de control de disparo alemanes y europeos, “utilizando la arquitectura de sistema única y las capacidades de integración ofrecidas por KNDS”.
Los ministros de Defensa de Alemania y Noruega, Boris Pistorius y Bjørn Arild Gram, han dado esta semana en la ciudad germana de Kiel, próxima a Dinamarca, el pistoletazo de salida a la construcción del primer submarino de la clase 212CD. Se trata de la unidad con la que arranca el proyecto de media docena de estas naves basadas en la clase 212A comprometidas por ambos países (cuatro para Noruega y dos para Alemania).
Al descender al detalle de lo que ha trascendido sobre el nuevo acuerdo se incrementan las sospechas de que París no debe de haberlo recibido con mucho entusiasmo, ya que el proyecto estará dirigido por las compañías alemanas Krauss-Maffei Wegmann (KMW) y Rheinmetall, que son las responsables del Leopard 2, y que en el caso de KMW está fusionada con la francesa Nexter dentro de la compañía KNDS, que en 2018 presentó el programa de futuro carro de combate europeo EMBT. En el nuevo acuerdo participarán, además de las citadas compañías germanas, Saab, por parte de Suecia, y Leonardo, por la de Italia, mientras que aún no ha trascendido el nombre de la empresa española implicada.
La empresa brasileña presentará soluciones para aviación comercial, defensa y movilidad aérea urbana en la Exposición Aeroespacial, de Defensa y Logística de Gyeongsangbuk-Do (GADLEX 2023)
Entre las señales que apuntan a un posible desencuentro, el medio señala el proyecto que Francia ha revelado que está desarrollando de forma independiente, sin más socios, sobre un avión de combate hipersónico con 2050 en el horizonte, denominado Espadon; el acuerdo que París ha suscrito con La India este verano de apoyo al “desarrollo conjunto de un sistema de combate aéreo”, sin contar tampoco con los aliados implicados en el FCAS; su cooperación con este país, además de Emiratos Árabes Unidos e Indonesia que podría llevarles al desarrollo del estándar F-5 del avión de combate francés Rafale, e incluso a un F-6 para mediados y finales de la década de 2030, que es el momento contemplado para que el FCAS sustituya a los Rafale (además de los Eurofighter alemanes y españoles), y el programa de drones, lanzado por la Dirección General de Armamento gala, que cooperarían con los Rafale, y que recuerda al previsto para el FCAS, que en su caso está en manos de Airbus, de lo que deriva una contradicción, ya que es difícil pensar que se emprenda una iniciativa así que luego quede enterrada por otra similar.
En un comunicado oficial, Portugal explica que la operación se enmarca en “las buenas relaciones internacionales” de ambos países, tras conocer “que el Gobierno de la República Federal de Alemania tiene disponible para la venta, en concepto de ‘paquete completo’, todo el inventario de su flota P-3C”, compuesta por seis aviones y elementos relacionados, como repuestos, equipos de soporte, bancos de pruebas, simuladores de vuelo, componentes de mejora de media vida (MLU) y procedimientos tácticos.
Los infantes de marina de la Flota del Norte de Rusia practican técnicas de combate en la región rusa de Múrmansk.
Casi 300 tanques occidentales y más de 500 del este Ucrania ya ha conseguido el compromiso para recibir 135 carros de combate del mismo tipo (Leopard 1A5), provenientes de Alemania y financiados por este país junto a Dinamarca y Países Bajos, más otros 30 Leopard A15BE, también comprados en Alemania por estos tres socios, y a los que se sumarían los 96 carros que podría suministrar Grecia a cambio de la misma cantidad de los antiguos carros italianos.
La introducción de Italia como socio conlleva el riesgo de que la parte alemana, que es la que lidera el proyecto, no acepte y todo el proyecto acabe anulado, según ha adelantado el diario francés Le Tribune, que se ha hecho eco de la propuesta prevista para incorporar a Italia.
Introducción en la Bundeswehr El sistema LUNA NG encargado para Ucrania forma parte de un amplio paquete de ayuda militar iniciado por el gobierno alemán en julio de 2023.
“El Consejo de Recursos de Defensa del Ministerio de Defensa Nacional, teniendo en cuenta el análisis de mercado detallado y la evaluación militar realizada por las Fuerzas Armadas de Lituania y la Agencia de Recursos de Defensa, ha aprobado proponer al Consejo de Defensa del Estado que envíe una carta de intención al Ministerio de Defensa alemán con respecto a la adquisición de tanques Leopard”, ha precisado Anušauskas.
En este contexto, Rheinmetall, como la propia empresa explica, busca “prepararse lo mejor posible de cara a nuevas y complejas licitaciones para el suministro de municiones”. Según ha explicado Rheinmetall, la compañía se asegura con esta adquisición “un aumento significativo de capacidades, en especial, en lo referente a toda la cadena de valor de la producción de munición en determinadas localizaciones españolas y en la sede norteamericana para la eliminación de municiones”.
De momento, Alemania, de donde ha partido la iniciativa para el desarrollo del nuevo carro, ya ha acordado que la República Checa se una a su acuerdo marco para la adquisición de estos blindados Leopard 2A8.
Incremento del gasto militar El Gobierno alemán, que al inicio de la invasión rusa de Ucrania anunció un notable giro en sus gastos de defensa, acaba de presentar unos presupuestos militares para el año que viene que supone alcanzar el compromiso con la OTAN del 2% del PIB. Esto implica que el de Defensa es el único departamento ministerial del país que va a experimentar un incremento en sus fondos en 2024.
Lo que ahora se ha adjudicado Rheinmetall es un nuevo contrato marco para el suministro de munición de artillería de 155 mm y la ampliación de un contrato marco existente.
Fabricación en ambos países El director gerente de Rheinmetall Landsysteme, Björn Bernhard, ha revelado que el montaje final de todos los vehículos contemplados en este acuerdo, tanto los alemanes como los neerlandeses, tendrá lugar en la planta que la compañía tiene en Ede, en Países Bajos, y en la de Eindhoven de Special Vehicles BV. “Tener dos ubicaciones de ensamblaje nos permitirá aumentar rápidamente la producción y, al mismo tiempo, contribuir a un valor agregado sostenido en los Países Bajos, nuestro país asociado”, ha precisado.
Proyectiles de 155 mm Por otro lado, coincidiendo con este acuerdo, la Bundeswehr también ha firmado con la compañía local Diehl Defense y la nórdica Nammo otro acuerdo marco para la obtención de munición de artillería de 155 mm, en concreto del proyectil explosivo Dina 155 mm, también con el propóstico de engrosar el arsenal nacional y ayudar a Ucrania.
Las autoridades de adquisiciones militares italianas están avanzando en sus negociaciones con el fabricante alemán Krauss-Maffei Wegmann para la adquisición del carro de combate Leopard 2A7 o 2A8, que son la última versión disponible y la que el fabricante prepara ahora de este modelo.