El Ejército de Chile efectúa el Curso Explorador de Combate en La Araucanía

Treinta oficiales y suboficiales de la III División de Montaña del Ejército de Chile participaron en el Curso Explorador de Combate que fue impartido por la Escuela de Inteligencia en el Centro de Instrucción y Entrenamiento Llafenco y en el Criadero Militar Los Cóndores en la Región de La Araucanía,

Según la institución, en este curso los alumnos aprendieron la doctrina y técnicas para desempeñarse como líderes o integrantes de una unidad de exploración, combinando, durante dos meses y medio, clases teóricas y ejercicios en terreno como la observación de los movimientos de un adversario con sigilo y sin poder moverse para no delatar su posición.

El jefe del curso explicó que “las unidades de exploración son fundamentales, porque permiten a los comandantes obtener información del terreno, del enemigo y del tiempo atmosférico, para complementar la planificación de las operaciones. Los exploradores son los ojos y oídos del comandante”.

El oficial agregó que una parte de la formación incluye las tácticas, técnicas y procedimientos SERE. Este entrenamiento permite a los efectivos Sobrevivir con los recursos del entorno, Evadir la vigilancia del enermigo, Resistir en combate si son descubiertos y Escapar si son tomados prisioneros.

Una especialidad con mística

El explorador de combate del Ejército de Chile debe saber materias como evaluación de rutas y obstáculos, topografía, técnicas de exploración y técnicas de combate a corta distancia, entre otros conocimientos.

Infiltrarse cerca del adversario requiere que estos especialistas aprendan a construir un puesto de observación con lo que hay en el lugar y dominar técnicas para permanecer largo tiempo inmóvil en condiciones de humedad, frío o calor.

Los alumnos deben arrastrarse como una serpiente sin usar rodillas ni codos mientras llevan una mochila y fusil, y construir un puesto de observación con ramas, hojas y una tela de camuflaje, y quedar inmóviles mientras el resto de la patrulla está oculta en el bosque durante 12 horas para superar la prueba.

La instrucción del curso es la misma para oficiales y suboficiales ya que una contingencia cualquier integrante de la patrulla de exploración le puede corresponder ser el líder ante la ausencia del de mayor grado.

“La participación de oficiales y suboficiales ayuda a desarrollar una mayor cohesión, porque se logra trabajar en equipo y se genera espíritu de cuerpo. Así, en el curso anterior egresaron dos mujeres -oficial y suboficial- que se desempeñaron muy bien”, recordó el jefe del curso, quien instó “a todo el personal del Ejército a postular a esta especialidad que es muy bonita, mística; que requiere mucha formación profesional y madurez”.