Santana Motor asegura que están solucionados los problemas del Anibal

12/09/2008 (Infodefensa.com) - La compañía Santana Motor S.A. ha asegurado que están solucionados ya los problemas detectados en el todoterreno 4x4 Anibal que provocaron que el Estado Mayor del Ejército de Tierra diera ordenes a principios de verano de inmovilizar esta flota de vehículos, incluidos aquellos desplegados en el exterior.

Un portavoz de la empresa sevillana, con fábrica en la localidad de Linares (Jaén), explicó que sólo se detectó un fallo de transmisión "en un solo vehículo" de lo cien "Anibal que se han revisado", informó el portal digital Confidencial Digital.com.

El portavoz destacó que cuando se detectó el problema se fijo "de mutuo acuerdo con el Ministerio de Defensa" la revisión de los cien todoterrenos y la orden de no circular con ellos hasta resolver el problema. La orden fue cursada por el entonces Jefe del Estado Mayor del Ejército, general Carlos Villar Turrau.

La revisión de los Anibal repartidos en los distintos acuartelamientos del Ejército de Tierra tras su salida de fábrica finalizó "tres semanas después de las reuniones" con los militares españoles, según el portal digital. "No ha variado los acuerdos alcanzados con Defensa", agregó el portavoz de Santana Motor.

La orden dictada por el Estado Mayor del Ejército de Tierra limitaba su utilización a los recintos de las bases españolas y restringía la velocidad máxima a que podían ser conducidos a 20 kilómetros por hora.

El modelo Coche Ligero Todoterreno (CLTT) Santana Aníbal PS-10 fue seleccionado en 2004 como vehículo todoterreno de una tonelada métrica de carga útil de "necesaria uniformidad en las Fuerzas Armadas" por el Ministerio de Defensa, que meses después inició la contratación de las primeras unidades con la adjudicación de 100 vehículos por 2,8 millones de euros.

Contratos por más de 56,1 millones de euros

Los siete contratos de compra de vehículos todoterreno Aníbal firmados por el Ministerio de Defensa desde 2004 hasta junio de 2008, así como todos los relativos a adquisiciones de repuestos y mantenimiento de este sistema de armas, por un valor conjunto de más de 56,1 millones de euros, fueron tramitados por procedimientos ordinarios, negociados y sin publicidad, según las resoluciones publicadas por el Boletín Oficial del Estado.

El primer contrato de compra de estos vehículos destinados al Ejército del Tierra data de febrero de 2005, fecha en que el Ministerio adjudicó a Santana la compra de 150 unidades carrozadas con caja de carga general y techo de lona por importe de 4,23 millones de euros.

El Departamento, entonces dirigido por José Bono, concedió a la compañía andaluza cinco meses después un contrato de adquisición de otros 20 vehículos carrozados blindados destinados al Ejército y con un presupuesto total de 1,34 millones de euros.

Ya en febrero de 2006, tras firmar varios contratos de compra de repuestos y equipos de diagnosis, Defensa adjudicó a Santana Motor su mayor contrato de adquisición, dotado con un presupuesto de 28,21 millones de euros para suministrar 1.000 unidades carrozadas.

La siguiente compra se materializó en febrero de 2007 cuando el Departamento dirigido en aquella fecha por José Antonio Alonso autorizó tres contratos de adquisición de vehículos Aníbal Santana con diferentes configuraciones con por un importe global de 17,59 millones de euros. La última adquisición, como ya se ha mencionado, data del pasado 12 de junio, fue firmada por Defensa el 14 de abril y consiste en la compra de 140 vehículos todoterreno de la versión de techo de lona con un importe de 4,79 millones.